La Fiscalía ha rebajado a un año y medio de prisión y 630 euros en multas la petición de condena contra dos hombres acusados de los delitos de estafa y daños intencionados por causar accidentes de tráfico de manera deliberada con el objetivo de cobrar de las compañías aseguradoras. Inicialmente, el Ministerio Público pedía una condena de cuatro años, en donde se incluía también el delito de lesiones, petición que ahora se recorta.

En el escrito de acusación de la Fiscalía, eran cinco personas de nacionalidad marroquí y con residencia legal en España las que tenían que haber sido juzgadas esta mañana en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra. Todos ellos estaban procesados por los mismos delitos. Sin embargo, dos de los acusados no acudieron al juicio al encontrarse en rebeldía, mientras que contra la quinta persona el fiscal retiró finalmente la acusación.

Las dos personas que se sentaron en el banquillo de los acusados declararon su inocencia y aseguraron que los accidentes fueron reales y los daños también.

Atendiendo a las peticiones de los abogados de la defensa, el tribunal de la Audiencia acordó que tan solo se podían juzgar los accidentes en los que estuvieron implicados los acusados presentes, al estar los otros dos huidos de la justicia, de modo que la sesión del juicio se centró tan solo en dos de los siniestros, los ocurridos el 6 de diciembre de 2013 en Cambados y el 1 de junio de 2015 en la Avenida de Vigo de Pontevedra.

El fiscal explicó el modus operandi de estos accidentes, en vía urbana, a escasa velocidad y en intersecciones en las cuales la incorporación del otro vehículo venía regulada por una señal de “stop” o de “ceda al paso” sin que los conductores implicados, a pesar de detener el vehículo, hubieran podido evitar el resultado dañoso porque el coche ocupado por los acusados colisionaba deliberadamente contra el contrario.

En el escrito de acusación, el fiscal relató que estas cinco personas causaron, entre diciembre de 2013 y junio de 2015, al menos cinco accidentes de tráfico. En algunos de estos accidentes ellos mismos eran los conductores de los coches siniestrados, mientras que en otros figuraban en el atestado como ocupantes del vehículo o como propietarios y tomadores de los seguros. En todos ellos fueron indemnizados por los accidentes.

Los accidentes se registraron en los municipios de Cambados, O Grove, Marín, Vigo y Pontevedra y, en la suma de todos ellos, la banda se habría apropiado de unos 51.000 euros, que el fiscal exige que devuelvan a las aseguradoras.

Los diferentes testigos que comparecieron en la sala de vistas coincidieron en destacar la teatralidad de la actuación de los acusados, que aceleraban hasta impactar de manera violenta y luego permanecían en el interior del coche hasta la llegada de la ambulancia. “Fue muy descarado”, dijo el conductor de uno de los vehículos contra los que chocaron los procesados, “el coche venía poco a poco y de repente pegó un acelerón. Había sitio de sobra para que pudiera pasar, pero vino a por mí, se veía el coche torcido hacia el mío”, continuó relatando. Después “rápidamente” hicieron que la Guardia Civil llamara a la ambulancia, a la que esperaron sin bajar del vehículo, “fue muy teatral”. El juicio ha quedado visto para sentencia.