En pleno debate sobre el futuro de Ence en Lourizán, un nuevo episodio se suma a los acontecimientos que vienen sucediéndose a lo largo de este 2021. Un grupo de 30 trabajadores de la pastera se concentró esta mañana a las puertas de los juzgados de A Parda, convocados por el sindicato CC OO, para arropar a su compañero Ramiro Cerdeira, investigado por un delito leve de allanamiento de la Casa Consistorial en la acción de protesta que llevó a cabo la plantilla el pasado 11 de marzo.

Fue en aquella fecha cuando un grupo de trabajadores tomó el Concello de Pontevedra para visibilizar su lucha por la continuidad de los puestos de trabajo de la planta de Ence en Lourizán, una protesta que esta mañana llegó a los juzgados de A Parda. Cabe recordar que, en el mes de junio, el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, declaró como testigo en la sede judicial, puesto que tras aquellos sucesos el gobierno local remitió al juzgado y a la Fiscalía el atestado de la Policía Local sobre lo ocurrido y se procedió a abrir unas diligencias en las que figuran como investigadas 13 personas que participaron en la acción de protesta.

El primero de los trabajadores citados en cuestión fue Ramiro Cerdeira que, si bien se presentó ante la jueza de Instrucción número 1 de Pontevedra, se acogió a su derecho de no prestar declaración porque todavía no han tenido acceso a la instrucción completa de la causa judicial. Así, Cerdeira apuntó que “non tiñamos ningunha instrución sobre o que dixeran os policías nin vimos o vídeo, así que mentres non teñamos a instrución non declararemos”.

"Aquel día non cometín ningún delito desde suposto allanamiento do que nos acusa o alcalde e compañía"

Este trabajador que lleva 30 años vinculado a la pastera, también indicó que “non sei se me ten manía o alcalde ou que pasa, porque só me chamaron a min das 13 persoas que entramos alí. Acúsannos de allanamiento, cando só entramos nunha sala na que non fixemos nada nin nos metemos con ninguén nin interrumpimos, pois deixamos seguir traballando a todos os funcionarios”.

Cerdeira afirmó que “estivemos esperando alí en son de paz e cando saíu o alcalde non fixemos mal a ninguén, nin somos a Ence Borroka, que iso é o que di o señor alcalde e compañía. Nós non fixemos nada malo nin golpeamos a ninguén”.

El empleado de la fábrica de Ence en Lourizán concluyó sus declaraciones indicando que continuarán luchando por la continuidad de sus puestos de trabajo en la ciudad de Pontevedra.

Lores responde a la Xunta

Tras la reunión de la mesa de diálogo sobre el futuro de Ence en Lourizán, celebrada el pasado viernes en la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra, a lo largo del fin de semana se han producido diferentes cruces de declaraciones entre las diferentes partes implicadas. Desde la Xunta de Galicia, tanto el presidente como el vicepresidente, Alberto Núñez Feijóo y Alfonso Rueda, respectivamente, insistieron en que no existe alternativa posible de ubicación para la pastera y defendieron que sí cumple la normativa.

Ante tales afirmaciones, el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, compareció en la jornada de hoy para criticar que "é absolutamente alucinante que se diga unha cousa e a outra". El regidor pontevedrés tildó de "incompetencia manifesta" a la Xunta de Galicia por su "inoperancia e deixadez" de funciones a la hora de abordar la salida de Ence de la ría, puesto que, en palabras de Lores, "Feijóo sabía perfectamente que a empresa en Lourizán tiña data de caducidade".

Asimismo, el alcalde de Pontevedra aseguró que el Ejecutivo gallego se entregó "con armas e bagaxes aos intereses de ENCE e aos seus accionistas", para después añadir que esto se hizo de muchas formas. Así, Lores enumeró entre ellas "cambios na lei de Costas, a prórroga ilegal, o acordo dun plan social para comprar vontades ou o apoio a unha posición de presión violenta contra o Concello, o que podemos dicir claramente que é a Ence Borroka".

En relación con esta cuestión, el regidor pontevedrés afirmó que si el Concello tuviera las competencias en materia de industria, ordenación del territorio y economía, "seriamos quen, non de manter os 500 postos de traballo, senón de manter ou crear eses 5.000 postos de traballo que di Ence que ten", concluyó.