A media mañana Montse Rodríguez atiende a un repartidor que acaba de entrar en la tienda. Este le entrega unas tortitas elaboradas con maíz y agua envasadas al vacío que Montse coloca con mimo en una cesta junto los tarros de galletas, palmeras bañadas en chocolate, bizcochitos y diferentes bollos de pan. Dice que son artesanas y no duda a la hora de afirmar que son las mejores que ha probado hasta la fecha.
Situada en el bajo número 17 de la calle San Román, en las estanterías de la tienda que regenta junto a su socia, María Bariego, la vista se pierde entre paquetes de pasta, cereales, masas de pizza, diferentes tipos de harina, pan fresco, cervezas, helados, snacks e incluso productos a granel. Y aunque bien podríamos estar hablando de cualquier tienda de barrio, lo que hace especial a O Berce es que se trata de la primera “despensa” sin gluten de Pontevedra, pues absolutamente todos los productos que se pueden encontrar en ella son aptos para personas celíacas.
Cuenta Montse Rodríguez que fue la inestabilidad económica derivada de la pandemia lo que la llevó a María Bariego y a ella misma a apostar por este negocio único en la ciudad, así como el hecho que el hijo de su compañera María está diagnosticado de celiaquía y convivían en su día a día con las diferentes trabas que esta dolencia implica: escasos locales de hostelería en los que comer con tranquilidad, tiendas o supermercados con productos sin gluten demasiado procesados y los elevados precios.
“Por una parte, María sabía de primera mano que era muy complicado encontrar en el mercado productos sin gluten que no estuvieran demasiado procesados y envasados, y por otra, nos interesaba todo lo relacionado con una alimentación sana, porque es nuestro modo de vida, el vegetarianismo y el veganismo, puesto que la alimentación es la base de todo, así que decidimos emprender esta aventura”, comenta Montse.
Tras la apertura de puertas a finales del pasado mes de mayo, comenzaron a llegar los primeros clientes a O Berce y Rodríguez afirma que “la gente quedó muy contenta y agradecida al poder tener una tienda alternativa en la que poder hacer sus compras”. Y es que la responsable del establecimiento indica que “cualquier persona puede hacer perfectamente una compra completa en nuestra tienda”.
En este sentido, Montse Rodríguez hace una pequeño repaso por los productos de los que disponen en O Berce y apunta que “siempre buscamos que estén libres de gluten al 100%, evitando trazas, para que así no haya contaminación cruzada y aunque intentamos que también sean ecológicos, a veces no tenemos más remedio que priorizar que sean aptos para celíacos antes de lo ecológico, porque realmente es complicado que reúnan estas dos características”.
Por otra parte, esta responsable de O Berce señala que también intentan disponer de productos frescos, como el pan, que traen a la tienda tres veces por semana, “algo que nuestros clientes nos los agradecen mucho”, asegura.
A pesar de que la otra socia de Montse se encuentra de vacaciones estas semanas, saca unos minutos para contar la experiencia de emprender este modelo de negocio. Así, a través de una videollamada, María Bariego explica que, “en casa siempre nos hemos preocupado por la alimentación y desde hacía unos años estábamos yendo hacia una más sostenible, retirando los envases y menos procesados, pero cuando llego el diagnóstico del niño todo eso se acabó, porque tuvimos que dejar de comprar a granel para evitar la contaminación cruzada”, relata María.
Tras animarse a hacer realidad el proyecto que llevaba tiempo rondando en su cabeza y en la de su socia Montse, se animaron a hacerlo realidad y confiesa que, “aunque estamos empezado, es cierto que ya tenemos a numerosos clientes fidelizados, muchos otros se desplazan a propósito para venir a hacer la compra y ahora, en verano, hemos notado también la llegada de turistas que se alojan en hoteles de la ciudad y que vienen a desayunar a nuestra tienda, porque en el hotel no disponen de alimentos específicos sin gluten”.
Por otra parte, María Bariego hace referencia al importante apoyo que supuso lograr en apenas dos meses el certificado oficial de la Asociación de Celíacos de Galicia (Acega), ya que “esto ayuda a que la gente nos conozco, pero además aporta a los clientes la seguridad y la tranquilidad de que no van a tener ningún tipo de problema con nuestros productos”.
Para lograr dicha acreditación, una persona de la entidad se desplazó hasta O Berce para impartir a estas dos amigas una formación específica, supervisó los alimentos que tenían a la venta e incluso se llevó muestras de las lentejas y de la avena que disponen a granel para testar que fueran aptas para celíacos. Finalmente, la asociación les remitió la pegatina que certifica que los productos de O Berce son 100% libres de gluten.
El siguiente objetivo para ambas socias es visibilizar que en su tienda pueden realizar la compra personas que no tienen por qué ser celíacas, de hecho, ambas coinciden en que “muchos alimentos, en su estado natural, no llevan gluten”.
Cerca del 1% de la población del área sanitaria es celíaca
La Enfermedad Celíaca (EC) es una patología multisistémica con base autoinmune provocada por la ingesta de gluten, normalmente, en personas genéticamente susceptibles. Los últimos estudios en torno a esta dolencia muestran que en España una de cada 200 personas es celíaca, mientras que en los países nórdicos afectan al 1% de la población. En el caso concreto del área sanitaria de Pontevedra-O Salnés, esta cifra alcanza a un 0,6% de la población, aproximadamente, según los últimos datos recabados por el servicio de Digestivo del Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra (CHOP). Asimismo, en las últimas décadas se ha registrado un notable incremento de diagnósticos en el complejo pontevedrés, de manera que el 70% se dan en personas mayores de 20 años. Si bien es cierto que en la actualidad que los profesionales están más atentos a los síntomas para efectuar los diagnósticos, lo cierto es que el origen de la celiaquía todavía no está claro. En este sentido, facultativos del servicio de Digestivo del CHOP indican que se pueden dar diferentes situaciones. Así, puede que la persona haya experimentado una excesiva exposición al gluten hasta desarrollar la intolerancia, otros manifiestan síntomas muy leves y hacen vida normal, y recientemente se ha descubierto que determinadas infecciones intestinales o cirugías gástricas pueden desencadenar la celiaquía.
