El fiscal antidroga mantiene la petición de condena para los seis acusados de tratar de introducir 500 kilos de cocaína a través del puerto de Algeciras en la denominada “Operación Bodeguilla”. Lo hizo en la última sesión del juicio, celebrada ayer, y que comenzó tres semanas antes en la Audiencia Provincial de Pontevedra.
Las penas que el ministerio público solicita para estos seis acusados suman en total 77 años de cárcel. En la última sesión del juicio el fiscal modificó ligeramente su escrito de acusación inicial, pero mantuvo la esencia de la acusación y las penas propuestas.
Así, para J.C.L., R.O.P. y J.R.C. se solicitan 15 años de prisión y multas de 168 millones de euros para cada uno. Para M.F. solicita 12 años de cárcel y 100 millones en multas; mientras que para R.J.D y J.C. se piden 10 años y 100 millones de euros de sanción.
En sus conclusiones finales, el fiscal antidroga defendió la figura y la legalidad de la actuación del agente encubierto en esta operación, al que algunas de las defensas atribuyeron la organización del golpe frustrado. De hecho, en la sesión de conclusiones finales el abogado de J.C.L. afirmó que se procedió arbitrariamente contra su defendido. “Se decide que una persona es traficante y a partir de ahí hay que meterla en prisión (…) el único fin era conseguir pruebas y encerrar al señor C.”, aseveró este abogado.
Los seis acusados que se sentaron en el banquillo de la Audiencia mantuvieron su inocencia y piden su libre absolución. El fiscal solicita para ellos penas que oscilan entre los 10 y 15 años de prisión por un delito contra la salud pública de sustancias que causan grave daño a la salud.
Según el ministerio público todos ellos conformaban una supuesta banda liderada por Luciano Núñez, “Lucky Luciano”, un vilanovés que falleció en 2020 a los 74 años.
El juicio se celebró así sin Luciano Núñez y con la ausencia de Christian Murder, que se fugó en 2018.
La denominada “Operación Bodeguilla” se saldó con la intervención de casi 500 kilos de cocaína que llegaron al puerto de Algeciras en 2016 en contenedores de fruta y de cacao, procedentes de Colombia y Brasil.
En la última sesión del juicio dos de los letrados introdujeron pequeñas modificaciones en su escrito de defensa inicial para admitir ilícitos menores a los que se les imputa.
