La Asociación de Balnearios de Galicia celebró en la Cidade da Cultura de Santiago su asamblea general ordinaria en la que Marisol Espiño, gerente de Termas de Cuntis, renovó su cargo al frente de la junta directiva. La reelección confirma la confianza depositada en la dirigente y “su responsabilidad en el complejo momento que estamos viviendo”. Otros nombramientos fueron los de Antonio Garaloces, del Balneario de Lugo, como vicepresidente; Jesús Garriga, de Caldas de Partovia, como secretario; y José Ramón Fernández, del Balneario de Carballo, como tesorero.

Durante la asamblea se valoró la reactivación del sector, ya que los balnearios de Laias, Mondariz, Cuntis, A Toxa e Aguas Santas se van a sumar en las próximas semanas a las reaperturas de los de Carballo, Lugo, Arnoia, Partovia y Dávila, este último en Caldas. Así, los balnearios gallegos comienzan a abrir sus puertas después de estar cerrados, en la mayoría de los casos, más de un año a causa de la crisis sanitaria.

“Fueron meses muy largos para todos, un período muy duro que ahora estamos dispuestos a recuperar y afrontar con ilusión. Necesitábamos esta reactivación, porque los centros termales son establecimientos que tienen un coste de funcionamiento muy elevado, debido a la cantidad de personal de diversos ámbitos profesionales que trabaja en los mismos y con unos gastos energéticos realmente altos, destacó Marisol Espiño.

18 establecimientos termales

La Asociación de Balnearios de Galicia nació en el año 1985 con el objetivo de representar y promocionar el sector termal gallego. Un grupo de empresarios se reunió en la Illa da Toxa y de aquel encuentro surgió la Asociación, la segunda creada en España.

En la actualidad está integrada por un total de 18 balnearios. En Pontevedra destacan Acuña y Dávila (los dos en Caldas de Reis) y las Termas de Cuntis.