El sindicato Acaip-UGT de trabajadores penitenciarios ha alertado de que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias "relaja la seguridad de los centros de inserción social" de Galicia y que "alrededor de 500 internos de estas secciones abiertas dispondrán de móviles, ordenadores, dinero, medicamentos y otros aparatos sin supervisión alguna en el interior de los establecimientos".

En un comunicado, la organización subraya que "la Instrucción relativa al protocolo de seguridad en los Centros de Inserción Social supone una vuelta de tuerca más para los profesionales penitenciarios que trabajan en el Medio Abierto, y pese a que su fin era asumir el tramo final de la condena de los internos en semilibertad, no han dejado de asumir en los diez últimos años nuevas funciones y responsabilidades como los trabajos en beneficio de la comunidad, seguimiento de medidas de alejamiento (pulseras) programas de educación vial o sexual, todo ello sin medios y en muchos casos de forma autodidacta por falta de formación por parte de la Administración".

Añade que estas nuevas normas de Instituciones Penitenciarias "pretende familiarizar y normalizar a los internos con las nuevas tecnologías, pero obvia la realidad en la que tiene que aplicarse, y la conducta delictiva de las personas que van a poder utilizar estos medios. Es más, parece que las nuevas formas delictivas que se dan con las nuevas tecnologías, como el ciberacoso a las víctimas de violencia de género, estafas, delitos en el ámbito sexual, usurpación de personalidad entre otros muchos, no pudiesen ocurrir de puertas para dentro, aunque no existan medios ni personal para evitarlos".

Se alerta también de que "los trabajadores estarán indefensos ante la divulgación de su imagen durante sus horas de trabajo".

"Esto por lo que se refiere a las nuevas tecnologías, dado que los medicamentos (no hay personal médico en los CIS) y otros objetos circularan libremente por los Centros de Inserción Social con idéntico control", insiste el sindicato, que concluye que "ni los establecimientos ni las plantillas de los CIS, están preparadas para asumir las directrices de seguridad y funcionamiento que el centro directivo está implementando".