El fiscal destacó la importancia de las pruebas periciales biológicas que incriminan al acusado de agredir sexualmente a una mujer en Tomiño en 2018. La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra dejó visto para sentencia el caso en el que según el testimonio de los forenses, los restos de ADN señalan al procesado como autor de la supuesta agresión sexual.El fiscal pide una condena de 12 años de prisión.

El acusado se ha declarado inocente en el juicio celebrado ayer. En respuesta a las preguntas de la Fiscalía explicó que conoce a la víctima porque vive cerca de la casa donde él reside junto a sus padres. Explicó que le contrató en varias ocasiones para que desbrozase su finca y detalló que en una ocasión se hizo daño con la desbrozadora y que ella le curó de las heridas dentro de la casa. Respecto al día en el que se produjo el supuesto asalto en casa de la mujer, el 8 septiembre de 2018, el acusado aseguró que, aunque se celebraban las fiestas locales, él se quedó en casa porque no se encontraba bien por el lupus que padece y tras haber sufrido días atrás un ataque epiléptico. Sus padres ratificaron esta versión ante el tribunal.

La víctima declaró a puerta cerrada, pero el fiscal valoró que su testimonio tenía “credibilidad sostenida” y que “de ningún modo es cuestionable la consistencia del relato”.

Las forenses del Instituto de Medicina Legal de Galicia aseguraron que las lesiones que presentaba la víctima son compatibles con los hechos denunciados.