La creatividad, con el nuevo grado de Diseño a la cabeza, y el desarrollo de proyectos europeos ligados a la economía del postcrecimiento, serán los principales ejes de actividad de la Universidad de Vigo en su nueva sede en el edificio administrativo de la Xunta, en la que las obras encaran su recta final. Con la adaptación de los espacios para la institución académica y la Fundación Moldes concluye la rehabilitación integral del inmueble, en el que la administración autonómica ha invertido 5,8 millones de euros.
Las obras finalizarán en el plazo de dos meses, según las previsiones que expuso el vicepresidente primero de la Xunta, Alfonso Rueda, que visitó ayer las plantas quinta a séptima del edificio, donde se llevan a cabo los trabajos de acondicionamiento para la Universidad de Vigo, acompañado del rector, Manuel Reigosa. Éste destacó la ubicación “en el corazón de la ciudad” de la nueva sede académica, y avanzó que “va a jugar un papel importante” en la docencia, investigación y transferencia, tres factores a desarrollar desde el campus CREA.
Con el grado de Diseño, “a punto de comenzar”, señaló Manuel Reigosa, que estima que la titulación arrancará “en uno o dos años”, la nueva sede acogerá el programa de doctorado “Creatividade e innovación social e sustentable”, una oferta académica “con matrícula totalmente cubierta y en la que hay lista de espera”, recordó el vicerrector, Jorge Soto.
Manuel Reigosa estima que el nuevo grado en Diseño empezará a funcionar "en uno o dos años"
Otro eje de actividad serán los proyectos internacionales. Uno es el Green Campus, un sello de calidad en el que Pontevedra fue pionera, y, especialmente, el grupo de investigación de Mario Pansera, ganador de una ayuda Starting Grant del Consejo Europeo de Investigación (ERC).
Pansera desarrollará durante los próximos cinco años la investigación Prospera (Prospering without growth: Science, Technology and Innovation) y el Post-growth Innovation Lab, el equipo que creará en el marco de este proyecto financiado con 1,5 millones de euros por el ERC.
Son dos programas “que tienen que ver con el desarrollo de las ciudades”, recordó el rector a propósito de este grupo que trabaja en nuevos campos vinculados a la transición ecológica y sostenible y a las alternativas al concepto tradicional de crecimiento y desarrollo económico, “un proyecto del máximo nivel internacional que nos puede servir para vislumbrar un futuro mejor”, indicó Manuel Reigosa.
Pansera desarrollará la investigación Prospera (Prospering without growth: Science, Technology and Innovation) y el Post-growth Innovation Lab, el equipo que creará en el marco de este proyecto financiado con 1,5 millones de euros por el ERC
Por su parte, el vicepresidente de la Xunta incidió en que, a mayores de la sede institucional de la Casa das Campás, “era necesario que la Universidad de Vigo se asentase aquí, un edificio que esta en ruina y que vuelve a cobrar vida con el tejido asociativo”, ya que en Benito Corbal cuentan con sede un total de 28 asociaciones, “y las oficinas de empleo”.
Concluida en 2019 la primera fase de la rehabilitación en la que la Xunta invirtió 4,8 millones, “faltaba darle uso a las plantas nobles”, recordó el vicepresidente, que felicitó los proyectos presentados por el rector para el edificio. “Creo que va a merecer la pena”, señaló Rueda en la visita a esta segunda fase de los trabajos, presupuestada inicialmente en 900.000 euros pero que tras incorporar varias mejoras se eleva finalmente a más de un millón.
Tras esta inversión, en la planta quinta se ubicará el grado en Diseño y el área de emprendimiento y captación de talento; la sexta se reservará para actividades académicas con espacios polivalentes para cursos, exposiciones, proyecciones etc, y la séptima será el Área CREA con zonas de visualización y montaje, trabajo colaborativo, etc.
Por su parte, en la octava planta la Fundación Moldes está “prácticamente terminada”, señaló Alfonso Rueda, de modo que la Xunta prevé cederla en breve a la entidad que lleva el nombre del fallecido pintor pontevedrés.
