Más de un mes ha sido necesario para recuperar las cifras de casos activos en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés por debajo del millar. Ayer eran, según informó el Sergas, 983, un número que se repite pero echando la vista atrás al pasado 17 de enero.

Sin embargo, la de ayer también fue una jornada con malas noticias, ya que se informó de cuatro nuevos fallecidos en el área: dos mujeres de 83 y 95 años y dos hombres de 80.

Con ellos son ya 151 las personas fallecidas por complicaciones con la enfermedad desde marzo. Todos tenían patologías previas, salvo casos excepcionales, como un hombre de 56 años que murió el pasado lunes en Montecelo.

Caída del pico

Desde mediados de enero hasta ahora, que se estabiliza, el área alcanzó su pico máximo, y de las tres olas de la pandemia, por cierto, con 2.613 casos activos el 4 de febrero.

Obviamente, la curva desciende y a pasos tan rápidos como cuando ascendió como consecuencia de la relajación de las medidas en las fechas navideñas.

Pero estas “buenas” cifras no son un motivo para relajarse, advierten las autoridades sanitarias, que recuerdan en que hay que seguir respetando las medidas básicas: distancia de seguridad, uso de mascarilla, evitar están en sitios cerrados, no superar el número máximo de personas reunidas (de cuatro no convivientes a partir de mañana viernes), etc...

Sin mejoría en la UCI

En donde la situación no mejora es en la unidad de cuidados críticos. Continúa habiendo 17 personas ingresadas en UCI en Montecelo, una cifra que no ha bajado en los últimos tres días.

Además, en planta son 55 los enfermos que permanecen hospitalizados.

Esta es una de las cuestiones que más se tienen en cuenta a la hora de establecer el nivel de riesgo del área, puesto que en las últimas semanas se tuvo que desviar a una veintena de pacientes al Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo.