Evitar la dependencia de los combustibles fósiles y reducir la contaminación que estos producen es uno de los grandes objetivos que persigue la Unión Europea a través de iniciativas como la Axenda 2030.

Esa alternativa para por el uso de vehículos eléctricos, que generan una energía limpia y no contaminante. Sin embargo, esa sustitución va demasiado lenta en la comarca de O Salnés, donde los puntos de recarga para vehículos eléctricos todavía no se han extendido, más allá de alguna iniciativa privada, especialmente hoteles, para ofrecer a sus clientes, y las administraciones públicas no han hecho una apuesta decidida por la introducción de estos vehículos en sus flotas, más allá de alguna iniciativa un tanto aislada.

El único municipio de la comara que ha dado pasos en firme ha sido Vilanova de Arousa que, en 2010, instaló un punto de recarga en las inmediaciones del edificio multiusos. Ese punto de recarga, que apenas tuvo demanda, se trasladó posteriormente a O Rial, a las inmediaciones de la base de Protección Civil, donde permanece para uso de la agrupación, aunque su tecnología ha quedado un tanto desfasada con todos los avances que se han registrado en todos estos años.

Más de una década después, con la llegada de un vehículo eléctrico que ha ofrecido muy buenos resultados a la Policía Local, el municipio vilanovés ha vuelto a fijarse en esta posibilidad y se ha lanzado a renovar con vehículos eléctricos toda su flota y, sobre todo, a instalar puntos de recarga o electrolineras que puedan garantizar el funcionamiento de los mismos.

El Concello, a través de una serie de ayudas de la Xunta, va a adquirir dos vehículos íntegramente eléctricos y de cero emisiones e instalará cuatro puntos de recarga de 20 kilowatios, ya que el actual es muy lento a la hora de recargar, al contar tan solo con 10 kilowatios.

Esos puntos se instalarán en las inmediaciones de la plaza de abastos, dos detrás del consistorio y un cuarto en la nave municipal de A Pantrigueira que, además de dar servicio a los vehículos municipales, también se lo darán a quien lo necesite. “Es nuestra apuesta por liderar un cambio energético en el municipio que permita ir hacia un modelo mucho menos contaminante”, explica Durán.

El regidor vilanovés no duda en presumir de los resultados que está ofreciendo el coche de la Policía Local y que “nos ha dejado a todos impresionados, incluso a los más escépticos con su funcionamiento, ya que no solo no contamina, sino que el mantenimiento es mucho más asequible”.