El pasado septiembre, el edil pontevedrés de Desenvolvemento Sostible e Medio Natural, Iván Puentes, propuso a la asociación Pedaladas colaborar en el diseño de una ruta que permita unir la senda Vilagarcía-Portas con la posible vía verde entre Pontevedra, Pontesampaio y Arcade, por el viejo trazado ferroviario. El colectivo vecinal que promueve el uso de la bicicleta ha presentado dos, uno de ámbito municipal, que ya entregó al Concello de Pontevedra, y otro más ambicioso, de extensión provincial, que hizo llegar a la Diputación de Pontevedra.
Ambas instituciones tienen sobre la mesa un proyecto de senda verde, que aprovecharía los trazados del tren en desuso y otros caminos rurales y vecinales. Pero la posibilidad de hacerlo depende en último caso del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que antes de desafectar las viejas vías del tren y entregárselas a las administración local quiere concluir toda la planificación de la alta velocidad ferroviaria de Galicia.
Quique Pérez, del colectivo Pedaladas, explica que recientemente han presentado al Concello y a la Diputación de Pontevedra los dos proyectos de senda peatonal y ciclista. El de trazado municipal discurriría entre Pontesampaio y el linde Pontevedra con Portas, pasando por Vilaboa. El segundo, más ambicioso, conectaría con las sendas previstas en Vilagarcía de Arousa en la parte norte y con la de Vigo por el sur de la provincia.
El concejal de Desenvolvemento Sostible de Pontevedra, Iván Puentes, ha recibido el trazado propuesto por Pedaladas para el tramo municipal. En la Diputación de Pontevedra recibió el trazado de la ruta provincial el diputado Gregorio Agís. Este tramo discurriría desde Vilagarcía de Arousa por Portas, Pontevedra, Soutomaior para enlazar después con la vía verde que se proyecta en Vigo.
Bajo coste
Ambas instituciones estudian ahora la viabilidad de los proyectos presentados por Pedaladas para su posible aprobación
El portavoz de Pedaladas indica que ambos proyectos tienen un bajo coste de ejecución, dado que las sendas ya están hechas, entre vías de tren abandonadas y caminos rurales, por lo que la inversión se destinaría únicamente a limpieza y señalización de los itinerarios, además de instalar algún elemento de calmado de tráfico en los puntos donde la senda peatonal y ciclista se cruce con otras vías de mayor tráfico. Se aprovechan principalmente caminos rurales y vías con tráfico solo vecinal.
Si bien la decisión final dependerá de la disponibilidad del Ministerio de Transportes para desafectar y ceder los trazados ferroviarios a la administración local, en Concello y Diputación “la sensación que nos da, o lo que ellos nos dan a entender, es que tienen ganas de hacerlo; otra cosa es que cuenten con todos los permisos necesarios de las administraciones implicadas y que consigan la financiación para ello”, explica Pérez.
Por otra parte, a diferencia de los proyectos propuestos por Pedaladas para crear carriles bici en la ciudad de Pontevedra, que se enfrentan al rechazo del BNG, este plan de senda verde sí cuenta con el apoyo de todo el gobierno municipal, como destaca Pérez.
Colectivos vecinales
Colectivos vecinales que defienden este proyecto –más de una decena respaldaron varias movilizaciones para reivindicar la vía verde– y administraciones locales esperan ahora la decisión del nuevo Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
Este departamento explica que tiene que rematar antes los trazados de las líneas de alta velocidad ferroviaria en Galicia, para tomar una decisión sobre la desafección de la vía antigua. Transportes no ha tomado ninguna decisión porque antes debe haber una implantación completa del tramo Coruña-Vigo, y de este modo saber si esos raíles del tramo Arcade-Pontevedra pueden ser desafectados o utilizados como un aparcadero de trenes de mercancías, según explica un portavoz de este departamento.
Transportes no tiene todavía definidos la intensidad, rutas y horarios para la vía entre Vigo y Santiago. Según indican fuentes oficiales, el Administrador de las Infraestructuras Ferroviarias (Adif) no se opone a la cesión de la vía, pero esta decisión dependerá de si el ministerio finalmente desafecta la vía porque no va a tener nuevos usos ferroviarios. Así, todo el plan está pendiente del desarrollo real de la alta velocidad en Galicia, ya que actualmente los trenes todavía utilizan esa vía.
Esta iniciativa comenzó a activarse en 2013, cuando entró en servicio la doble vía del Eje Atlántico entre Pontevedra y Pontesampaio y dejó de utilizarse el antiguo trazado. Han pasado ocho años sin que ningún convoy circule por esas abandonadas vías, pero Fomento se resiste a desprenderse de ellas.
En la Comisión de Seguridad Vial celebrada en el Congreso de los Diputados el 20 de febrero de 2019 se aprobó una propuesta de la entonces diputada de En Marea Alexandra Fernández en la que se instaba al ministerio a ceder las vías en desuso entre Pontevedra y Vigo para crear ese recorrido peatonal y ciclista, pero el PSOE quiso excluir expresamente el tramo entre la capital y Arcade. Aunque la iniciativa fue aceptada, lo hizo sin el voto a favor del PSOE y del PP. Ambos grupos optaron por la abstención. Los socialistas lo hicieron argumentando que no es técnicamente posible esa cesión e incluso formularon una enmienda para eliminar el tramo aludido del acuerdo, mientras que el PP apeló al complejo mantenimiento posterior para evitar su apoyo.
Pontevedra quiere unir la senda Vilagacía-Portas con la de Arcade a través del puente de Lérez y otros caminos
La propuesta planteada por el concejal de Desenvolvemento Sostible e Medio Natural a Pedalada era el diseño de una ruta que permita unir la senda Vilagarcía-Portas con la posible vía verde entre Pontevedra, Pontesampaio y Arcade, a través del antiguo puente ferroviario sobre el Lérez, la Ruta Xacobea y otros caminos preexistentes. En este caso el colectivo Pedaladas realizó un proyecto de las rutas que permitirían salvar los aproximadamente 17 kilómetros que separan Portas de Lérez. Salvo en el tramo de A Portela (en Barro), entre ambas localidades “no hay prácticamente ninguna zona de vía vieja de ferrocarril que esté en desuso”, como constató el concejal Iván Puentes, pero “sí que a través del Camino de Santiago, de otros caminos forestales, vías e infraestructuras preexistentes, es posible llegar hasta Pontevedra y proyectar la inserción en esa futura senda verde hasta Pontesampaio y Arcade del antiguo puente del ferrocarril entre Lérez y Monte Porreiro, que ya tenemos cedida al Concello y que vamos a poner en valor, y finalmente conectarla con la estación de trenes de la ciudad”, expuso en su día el concejal socialista de Medio Natural. El edil apuntó que los ayuntamientos de Vilagarcía, Portas y Caldas “están trabajando muy activamente en esa fantástica idea de la vía verde hasta Portas, y a nosotros nos gustaría conectarla con la futura senda verde a Arcade”.
