Una semana después de que se parara la actividad en el marisqueo de forma preventiva a raíz del foco de Campelo, que afectaba también al entorno de la lonja, las profesionales volvieron ayer a la las playas. Regresaron después de que las tres cofradías se sometieran a un cribado preventivo se la mano del Sergas que ha dado 16 positivos.

La pasada semana 580 mariscadoras de Lourizán San Telmo y Raxó fueron llamadas vía telefónica para realizarse una PCR en el Hospital Provincial. En total se recogieron 489 muestras nasofaríngeas , con lo que la participación fue del 84,3% de la población convocada voluntariamente.

En un desglose por colectivos, a la iniciativa preventiva efectuada por el Área sanitaria de Pontevedra y O Salnés asistieron, 164 profesionales del marisqueo de la cofradía de Lourizán, 200 efectivos de la cofradía de Sano Telmo y 125 componentes de la cofradía de Raxó, dando en total los 16 positivos por coronavirus que fueron comunicados de forma individual.

El sector se mostraba ayer contento de poder volver a la actividad y agradecía que este parón haya coincidido casualmente con el temporal, de manera que solo han perdido un día de trabajo.

Así, ayer volvió a haber subasta en la lonja de Campelo, en la que los últimos días solo se había ofertado navaja.

La jornada de trabajo se desarrolló con total normalidad y los patrones, que aún no conocían las cifras de los positivos, se mostraron satisfechos con la asistencia.

El sector recuerda que hay buen producto en cuanto a cantidad y tamaño, tanto que se subastaron más de 3.000 kilos de almeja japónica. La acogida fue buena, y es que los precios subieron con respecto a la última subasta y oscilaron entre los 8,98 y los 10,30 euros el kilo según la variedad.