El efecto de las navidades está llevando a Galicia de récord en récord en el número de contagios diarios y el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés no es ajena a esta preocupante tendencia. El sábado los nuevos positivos pegaron un nuevo acelerón al diagnosticarse un centenar de infecciones por COVID-19, tan solo quince menos que los alcanzados a principios de noviembre cuando el área sanitaria rompió su techo de casos diarios.
Entonces la segunda ola del coronavirus golpeaba con fuerza a Pontevedra y O Salnés, que quince días después alcanzó su pico de casos activos en toda la pandemia al llegar a los 1.277. La curva, en la actualidad, todavía se encuentra lejos aunque crece día a día ya que las altas no compensan los contagios diarios. Ayer Sanidade comunicó un total 954 personas que padecen la enfermedad en fase activa del virus, 47 más de las que había el viernes.
La alta incidencia del virus en el área sanitaria y la tasa de positividad, que todavía duplica a lo recomendado por la OMS para el control de la pandemia, tiene su reflejo en la carga asistencial. El sábado la presión hospitalaria volvió a incrementarse con dos pacientes más ingresados, hasta los 66. Doce de ellos son enfermos críticos, ingresados en la UCI de Montecelo, y el resto se reparte entre las plantas de hospitalización del CHOP (45), del Hospital de O Salnés (7) y del QuirónSalud Miguel Domínguez (2). Haciendo cuarentena en sus domicilios, con síntomas menores o sin ellos, pasan la enfermedad un total de 888 personas.
En cuanto al número de recuperaciones, estas se incrementaron ayer en 53. En total 6.869 personas se recuperaron de la enfermedad y 90 perdieron la vida a causa del virus. Desde el inicio de la pandemia se realizaron en el área sanitaria 123.664 pruebas PCR. En las últimas 24 horas se efectuaron 632 de las que 82 arrojaron un resultado positivo.
Situación por municipios
Texto Por concellos, preocupan los datos que llegan desde Pontevedra y Poio, cerrados perimetralmente de forma individual, y en donde ayer volvieron a incrementar los casos activos de coronavirus. En la Boa Vila el sábado se volvió a superar la barrera de los 200: 204, siete más de los que había el viernes. Por su parte, en el concello de Poio los casos crecieron en ocho, hasta los 114. En cuanto a los otros dos municipios de la comarca pontevedresa bajo máximas restricciones, Caldas de Reis y Cuntis, ayer Sanidade comunicó a sus alcaldes 59 y de 32 casos activos, respectivamente.
Aunque Sanidade decretó el máximo nivel de alerta en siete concellos del área sanitaria (Poio, Caldas, Cuntis, Bueu, Vilanova, Vilagarcía y A Illa de Arousa), ya son más los municipios que superan la incidencia acumulada de 250 casos por 100.000 habitantes a 14 días: Meis, Moraña, Catoira y Soutomaior.
Por último, la situación epidemiológica en el municipio de Marín continúa mejorando y ayer volvieron a bajar los casos activos hasta los 56, cuatro menos que el viernes. En Sanxenxo, en cambio, crecieron a los 35 tras sumar dos en la última jornada.
El virus avanza en residencias y colegios del área
El coronavirus llegó ayer a la residencia de mayores de Cercedo-Cotobade, que comunicó el contagio de un trabajador. Este positivo se suma al de otros dos empleados en la residencia Nosa Señora da Asunción de Caldas de Reis. La buena noticia llegó ayer en el parte de Políticas Sociais para la residencia DomusVi Ribadumia, libre de COVID tras el negativo de tres trabajadores. Más preocupante es la situación en colegios, escuelas infantiles e institutos del área sanitaria que, tras reanudar sus clases el pasado 8 de enero, suman un total de 162 contagios entre alumnos y profesores y mantienen 4 aulas cerradas.
