La marcha de trabajadores de Ence a su paso por la carretera vieja de Marín. | // GUSTAVO SANTOS

Una marcha a pie entre la fábrica de Lourizán y la Subdelegación del Gobierno fue ayer el pistoletazo de salida de una serie de movilizaciones que han decidido emprender los trabajadores de Ence para defender la permanencia de la pastera en la ría durante los 60 años de prórroga de la concesión otorgada en 2016 a la empresa por el gobierno en funciones del PP.

En este caso, el detonante de las movilizaciones es la tramitación de la Ley de Cambio climático o, más bien, uno de los artículos recogidos en el borrador de la normativa que, según los trabajadores de Ence y el sindicato Comisiones Obreras, pretende recortar el tiempo efectivo que puede permanecer Ence en Lourizán para situarlo como máximo en el horizonte de 2033. Se trata del artículo 18.4 en el que se señala que las concesiones en terrenos de dominio público no se pueden prolongar más de 75 años incluidas las prórrogas que se puedan conceder a sus beneficiarios. Esto supone que Ence, aún si los tribunales validan la prórroga concedida en su día por el gobierno de Rajoy, no podría permanecer en la ría más allá de 2033, cuando se cumplen 75 años de la concesión original. Y es que aseguran, que el texto recoge que esta medida se aplique con carácter retroactivo a las concesiones y prórrogas ya en vigor.

En el manifiesto al que dio lectura Ana Cedeira, presidenta del comité de empresa de oficinas de Ence, se acusa al “Gobierno del PSOE” de querer meter “por la puerta de atrás” en esta ley de cambio climático “nuestra muerte como empresa, como sector y como medio económico” del que viven “miles de familias” en Pontevedra y Galicia. Consideran que se trata de una “utilización perversa de la ley para recortar los plazos de las concesiones” que “no vamos a permitir ni consentir”.

“A partir de hoy volvemos a lucha”, aseguró, “por la defensa de nuestros puestos de trabajo”. Cedeira asegura que “se va a escuchar Ence sí y Ence en Lourizán en donde haga falta”.

Los trabajadores –más de un centenar apoyados por empleados de empresas auxiliares que realizaron la marcha a pie hasta la subdelegación cumpliendo con las distancias de separación a las que obliga la pandemia– quisieron hacer un llamamiento “al Ministerio de Transición Ecológica, al PSOE, a los grupos parlamentarios y al Gobierno para la retirada de ese artículo 18.4 de la ley de cambio climático”. “Los políticos están para protegernos y garantizar nuestros derechos básicos, no para destruirlos”, indicó Cedeira, “lucharemos hasta el fin, PSOE entérate, Ence no se cierra”, concluyó.

Y es que este calendario de nuevas movilizaciones que arrancó ayer continuará con nuevas concentraciones ante la Subdelegación y la sede del PSOE de Pontevedra en las próximas semanas, así como una caravana de vehículos ligeros por la ciudad, una peregrinación a Santiago para protestar ante la sede del PSdeG y finalmente una caravana de camiones.