Pasados ya diez días desde Reyes, última jornada en la que se permitió cierta relajación en las medidas para contener el avance del virus, en el Servicio de Alertas Epidemiológicas de la Jefatura Territorial de Sanidade en Pontevedra disponen de margen para empezar a hacer balance de qué han supuesto las fiestas para el área sanitaria. En los últimos catorce días, en los municipios de Pontevedra y O Salnés se detectaron un total de 76 brotes de coronavirus que, con fecha de ayer, elevaron los casos activos a los 907 y el número de contactos en cuarentena por encima de los 3.600. Para el jefe del Servicio de Alertas Epidemiológicas, Miguel Álvarez Deza, la respuesta a cómo se ha llegado este nivel de incidencia es inequívoca y pasa por la responsabilidad individual:“la gente no cumplió”.
“A esto se llegó por las navidades. Aunque se pidió que las reuniones fueran entre los grupos de convivencia o con los que se tiene un contacto diario la gente no lo cumplió”, aseguró el epidemiólogo con los datos de los contagios sobre la mesa. Nadie puede “entrar en casa de nadie a comprobar si eran cuatro o si eran diez”, razonó Álvarez Deza, pero sí puede verse en el resultado, las características de los brotes. “Desde el 2 de enero se detectaron en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés 76 brotes. Menos dos, todos son de origen familiar”, señaló el jefe del Servicio de Alertas Epidemiológicas de Pontevedra.
En cuanto a la extensión de los focos, la mayoría oscila entre los tres y los cinco infectados por cada brote familiar, entre los que en el Sergas contabilizan los contagios por encuentros entre amigos, no solo por relación de parentesco. Hasta la fecha, el brote más numeroso y que sirve de ejemplo de propagación en encuentros de este tipo es uno de los dos detectados en A Illa de Arousa y que asciende a los 33 positivos. “Empezaron unos familiares y fueron contagiando al resto de la familia, que además se dedica al marisqueo por lo que algunos también comparten coche”, señaló Deza.
A pesar de que el área sanitaria se encuentra desde ayer dividida entre dos niveles de alerta, el máximo y el medio-ato, en Alertas Epidemiológicas detectaron a los largo de los últimos 14 días brotes familiares “en muchos de sus municipios”. Activos en Pontevedra, concello bajo vigilancia especial por parte de Sanidade, se mantienen una docena de focos. En Caldas, Poio y Cuntis, los tres concellos de la comarca en nivel de alerta máximo, se contabilizan siete, seis y cinco, respectivamente. Sanxenxo comparte tres focos familiares con O Grove y en Marín hay otros cuatro.
Más allá de los brotes detectados de origen familiar, los dos que restan se produjeron en el ámbito sociosanitario y en el laboral. Uno de ellos es el detectado en el Hospital de O Salnés que, según la última información disponible el viernes de los datos, se mantiene estable en los nueve infectados.
Índice de reproducción
Tras un primer balance negativo a raíz de las fiestas, en el Servicio de Alertas Epidemiológica esperan que los datos empeoren. “Las fiestas acabaron el 6, hasta la próxima semana vamos a seguir subiendo”, advirtió el jefe del servicio, quien valoró que con el aumento de contactos es probable que haya subido el índice reproductor del virus del 3 al 4. “Por cada caso de coronavirus se contagian tres personas, es el índice de reproducción básica. Ahora podemos multiplicarlos por cuatro”, explicó. Por ello, con 907 casos activos detectados en el área sanitaria, el epidemiólogo cifra a las personas en seguimiento en torno a las 3.600.
Además, a Álvarez Deza le preocupa la llegada de la cepa británica, de la que asegura va acompañada de un mayor ritmo de contagio y de la que hay confirmada dos casos en el área. “Es una cepa que se está minusvalorando. Es más transmisible, aunque los casos no son tan graves”. Por ello, explicó, aunque los números crecen rápido, no lo hacen en igual medida los pacientes ingresados. “Se refleja en el índice de ocupación de camas y de UCI, que no es tan alto”, concluyó.
Cribados masivos en seis concellos
Para tratar de detectar personas asintomáticas que ayuden a propagar el virus, desde Sanidade incrementaron este fin de semana los cribados masivos en seis concellos del área sanitaria. El viernes se iniciaron en Bueu, en una campaña que se extenderá hasta el lunes para una población diana de 9.915 personas; así como también en Cambados, en Vilagarcía y en Cuntis. En estos tres municipios estaban llamados ayer a realizarse una prueba PCR 20, 58 y 26 personas, respectivamente, procedentes de centros de día y de residencias. Hoy continuarán realizándose cribados en la empresa conservera Connorsa, ubicada en Vilaboa, en donde están citadas 140 personas. El lunes volverán a realizarse pruebas en Vilagarcía, en el centro comercial, a 273 vecinos.En Pontevedra también están llamados estos días a realizarse una PCR un total de 140 alumnos y trabajadores del centro CEE PPE Felipe, de educación especial, que se realizarán en el espacio denominado como COVID-auto.
