“Eran 9 vagones y todos hasta arriba de pasajeros”, lamenta Saúl Paz Eiras al recordar su reciente viaje en tren desde Madrid, que concluyó con “unas seis horas parado entre Puebla de Sanabria y A Gudiña”, denuncia, sin que se respetasen “ni las distancias ni otras medidas de seguridad para evitar los contagios de COVID-19”.
Este vecino de Marín ha interpuesto una reclamación ante Renfe por el viaje que inició el pasado día 11 en el tren Alvia 04185. Salió de la estación madrileña de Chamartín a las 18.25 horas “y todo estaba repleto, el tren iba lleno”, recuerda Saúl Paz, que ocupó uno de los asientos (el 02D) del coche número 6.
La previsión es que el trayecto durase unas cuatro horas y media, pero se prolongó “unas doce”, explica. “Estuvimos tirados tanto yo como todos los pasajeros que viajábamos, porque iban a tope los vagones”, añade, entre Puebla de Sanabria y A Gudiña.
“Estuvimos tirados tanto yo como todos los pasajeros que viajábamos, porque iban a tope los vagones”
Renfe señaló al temporal como causante del bloqueo, que motivo que el Alvia “que debería llegar a las 11 de la noche a Santiago llegase a las 5 de la mañana y a las 6 a Pontevedra”.
¿Qué explicaciones recibieron los pasajeros? Saúl Paz asegura que “ninguna, salvo que estaban las vías congeladas. Primero nos decían que era un fallo que iba a tardar una hora, después que era media hora más, después dejaron de dar información a la tercera hora y así hasta seis horas parados”.
Lamenta que no pudieron ni tomar un café y en la reclamación hace constar que “la cafetería estaba cerrada” y dado que no estaban parados en una estación o población no tuvieron oportunidad de hacerse con “alimentos o bebidas”.
El viajero ha solicitado la devolución del coste del billete y critica que los dos trenes que hicieron con anterioridad la misma ruta “tuvieron el mismo problema”, sin que la empresa pública de transporte “pusiese los medios para solucionarlo” o, en su defecto, optase por la suspensión del viaje “ante la imposibilidad de cumplir un servicio de calidad”.
"Primero nos decían que era un fallo que iba a tardar una hora, después que era media hora más, después dejaron de dar información a la tercera hora y así hasta seis horas parados”
Reconoce que le preocupó especialmente la falta de medidas sanitarias, desde el hacinamiento a que “no se ofreció la posibilidad de sustitución de las mascarillas higiénicas a los pasajeros, a pesar de que se recomienda no usar la misma por un tiempo superior a 4 horas”, como hace constar en la reclamación. Insiste en que tampoco “se guardaban las medidas de seguridad” relativas al necesario distanciamiento.
“En el asiento de al lado viajaba una persona con la que no tengo ninguna relación y de hecho ahora tengo sudores, me estoy controlando y mi preocupación es que hayamos podido coger el virus”, afirma este vecino de Marín que por el momento no presenta síntomas pero que ha solicitado realizarse una PCR para descartar un positivo por COVID-19.