El invierno más atípico de las últimas décadas nos trae, al menos, una buena noticia: la incidencia de la gripe está siendo, como mucho, puntual y por el momento no se ha producido ningún ingreso por esta enfermedad en el Complexo Hospitalario de Pontevedra (CHOP).
La explicación más lógica es, según los médicos del Hospital Montecelo, que las consecuencias de las medidas preventivas del COVID benefician también a la sociedad a la hora de evitar contraer otro tipo de virus, como son los respiratorios de invierno. Esto ha provocado que en lo que va de esta estación todavía no se haya producido el habitual “colapso” en los servicios de Urgencias.
“Al menos de momento no hay indicios del inicio de la onda epidémica anual de gripe, tan solo algunos casos aislados y esporádico”, asegura el doctor Javier Paz Esquete, responsable del servicio de Medicina Preventiva del CHOP, que añade que se trata de una tónica general tanto en el conjunto de Galicia como de España “y el resto de Europa”.
Pero es que no solo es la gripe la que todavía no está dando demasiadas señales de presencia, sino también otros virus respiratorios, como el sincitial, “de especial relevancia en niños y lactantes”, así como en personas con el sistema inmune debilitado.
“También en el hemisferio sur en Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica y algunos países de América del Sur observaron incidencias mínimas de gripe, en algunos casos las más bajas de su serie histórica, con datos tan llamativos e impactantes como una reducción del 90 por ciento de la mortalidad por esta enfermedad en Australia”, informa Paz Esquete.
“La razón de fondo más plausible es que las medidas de contención y prevención que estamos aplicando para evitar la transmisión del coronavirus son también efectivas para evitar el contagio de estos otros virus”, destaca el doctor.
La higiene de manos, el uso de mascarilla fuera de casa y la distancia de un mínimo de dos metros han resultado ser, en este sentido, un “beneficio colateral”.
No obstante, el responsable de Medicina Preventiva, uno de los servicios clave en la lucha contra la pandemia en el área sanitaria, advierte de que “debemos seguir siendo prudentes y en ningún caso bajar la guardia”. “Aún quedan semanas de los meses fríos, los de más riesgo para estas infecciones. Semanas que, en cualquier caso, serán duras por la COVID”, alerta.
Se esperan más casos ahora
Por su parte, el jefe del servicio de Medicina Interna, Juan Carlos Rodríguez, considera que “era entendible que iba a haber poquísima gripe”. “Se esperan casos ahora en los meses de enero y febrero, pero muy pocos”, matiza.
Preguntado por la posibilidad de que el organismo se vuelva más vulnerable, a raíz del uso de la mascarilla, a virus como el de la gripe, responde negativamente. “Es más, todas las infecciones dependen del inóculo bacteriano o vírico que entra al cuerpo. Al tener la mascarilla siempre va a entrar menos inóculo, por lo que la infección en sí va a ser más leve. Esto también explicaría que la gente no vaya a Urgencias por esta enfermedad, porque la sintomatología es mucho menor”, explica.
Desde el mes de marzo se han producido en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés 83 fallecimientos por COVID, mientras que en la campaña de la gripe del año pasado solamente se registraron dos decesos por gripe en el CHOP. Esto demuestra lo que los sanitarios ya venían informando desde hace tiempo: que la mortalidad de esta nueva enfermedad es hasta 30 veces mayor.
La principal diferencia entre ambas es la vacunación. La campaña de la gripe se ha ampliado hasta el próximo mediados de enero, mientras que la del coronavirus todavía se encuentra en la fase de protección de usuarios de centros de mayores y sus trabajadores, colectivos a los que seguirán los profesionales de la sanidad.
Aumentan a 55 las hospitalizaciones por coronavirus
Las hospitalizaciones por COVID en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés han aumentado a 55 ayer, Día de Reyes. Según la información facilitada por el Sergas, son 44 las personas que permanecen ingresadas en planta hospitalaria, mientras que otras 11 están en la unidad de cuidados críticos, UCI, de Montecelo. Asimismo, ha habido 33 contagios más por el virus, que, teniendo en cuanta las 41 altas producidas, dejan un total de 743 casos activos en el área. Desde el inicio del plan de contingencia del COVID, se han curado en Pontevedra y O Salnés 6.77 pacientes, mientras que han fallecido otros 83. En cuanto a realización de PCR, desde marzo suman 117.753.
Cribados en O Salnés
Actualmente, la comarca de Pontevedra evoluciona de forma estable y “razonablemente bien”, según la gerencia del CHOP. Por el contrario, es la de O Salnés la que presenta peores cifras. Para frenar la pandemia en ésta, mañana viernes y el sábado se realizarán nuevos cribados preventivos en el municipio de a Illa de Arousa, dada la persistencia de casos en esta localidad. En esta ocasión serán a la población de más de 15 años y tendrán carácter voluntario. Para ello, una docena de profesionales coordinados por un facultativo iniciarán mañana el trabajo con seis equipos que entregarán a los ciudadanos de entre 15 y 69 años botes de recogida de muestras de saliva entre las 8.30 y las 19.30 horas. El sábado tres equipos tomarán muestras nasofaríngeas voluntarias a la población de más de 70 años, mientras que otros dos equipos recogerán los boetes entregados para la saliva del día anterior. Los resultados se comunicarán vía SMS o llamada telefónica.
