El Concello de Pontevedra apostará en 2021 por la inversión en la economía local y no por la rebaja de tasas e impuestos, como estímulo a la economía frente a la crisis. El gobierno municipal elabora unas cuentas anuales que rondan los 100 millones de euros y la fórmula con la que el Concello quiere hacer frente a la actual crisis es el conocido como “multiplicador keynesiano” de la inversión, que indica que un aumento del gasto provoca un efecto multiplicador de las rentas, como explicó ayer el concejal de Economía e Facenda, Raimundo González.

Sin la ley Montoro

Así, Pontevedra se desmarca del anuncio de rebaja de tasas e impuestos que han hecho otros municipios del entorno, como medida anti crisis, y apuesta por aprovechar la suspensión de tres principios de la conocida como “ley Montoro”: posibilidad de endeudamiento, aumentar el techo de gasto y no tener que cumplir la norma de estabilidad presupuestaria, para destinar unos 30 millones de euros del presupuesto local a inversiones y así estimular la economía en el municipio.

El gobierno municipal está trabajando en la elaboración de un presupuesto anual que confía en tener listo a finales de diciembre. Este presupuesto superará los 100 millones de euros el año que viene y, como suele suceder en condiciones normales, será el más alto de la historia. El último presupuesto aprobado en Pontevedra fue de 79.336.000 euros.

“Los mejores resultados”

Raimundo González argumentó que “lo que pretendemos es poner todos los recursos y todos los instrumentos que tengamos a nuestra disposición, para conseguir recuperar la situación económica de Pontevedra y que vuelva a estar en parrilla de salida y que tenga los mejores resultados posibles”.

La confección del documento presupuestario parte de la aprobación por parte del Congreso de los Diputados, de la suspensión de esos tres principios fiscales de la Ley Montoro o Ley de estabilidad presupuestaria. El concejal indicó en este sentido que para el año 2021 “no va a haber cortapisas a la deuda, ni al techo de gasto ni a la estabilidad presupuestaria. El marco en el que nos movemos para este presupuesto es diferente a ejercicios anteriores”.

Con este punto de partida, el Concello está elaborando un presupuesto para 2021 en dos fases: una ordinaria, que sería el equivalente a un presupuesto normal y una segunda fase, que se pondría en marcha una vez aprobada la liquidación del Presupuesto de 2020, “un paquete medias potentísimo”, aseguró el edil de Economía de Pontevedra.

Ayudas a los sectores afectados

Tras el último presupuesto aprobado en Pontevedra, de 79,3 millones, “vamos a pegar un salto superior a los 20 millones, espero, fundamentalmente para inversiones”, anunciaba ayer el concejal de Economía e Facenda, Raimundo González, quien afirmó que además de ser el más alto de la historia “y probablemente tardemos muchos años en llegar a estos niveles presupuestarios”. El edil añadió que se mantendrán o reforzarán ayudas a los sectores afectados por la crisis como el plan Supera20. “Vamos a romper el bolsillo” –aseguraba Raimundo González– “todo el remanente que tengamos se va a destinar a inversión o las ayudas económicas a los sectores afectados. Lo que dijimos era que había que reactivar la economía. En esta situación económica tan dura y cruda, pensamos que era el momento de movilizar todos los recursos”, explicó.