Sonora protesta de los hosteleros de Pontevedra contra la "muerte" del sector por las restricciones para contener el covid-19. Con bandejas y otros elementos de cocina, dueños y trabajadores se apostaron ante sus locales a las 12.30 horas para realizar una cacerolada. La protesta tuvo un amplio seguimiento en los locales centro casco histórico de la Boa Vila y fue especialmente visible en la plaza de la Verdura, en el entorno del Teatro Principal y en la Ferrería. Se sumaron a la iniciativa establecimientos de Poio.

El sector clama así contra las limitaciones derivadas de la segunda ola del coronavirus, que en Pontevedra ha roto todos sus récords de contagios. El pasado viernes, Sanidade decretó el cierre perimetral de la Boa Vila, Poio y Marín, además de acotar las reuniones únicamente a convivientes. Estas medidas han supuesto un duro varapalo para bares, cafeterías y restaurantes, que han visto como sus establecimientos se vacían pero sus gastos se mantienen.

Ante su insostenible situación, y al límite de su supervivencia, el sector convocó para hoy un cierre voluntario de negocios, ya que "hay locales que no se pueden permitir" parar por completo su ya mermada actividad.

Conocidos nombres se han sumado a la protesta, como el Savoy en la Ferrería, y prácticamente todos los locales de la plaza de la Verdura.