El ritmo de contagios de Covid en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés no se relaja. La Consellería de Sanidade informó ayer de 53 positivos más, que sumados a los que ya había hacen un total de 639 casos activos. También hay que sumar un nuevo fallecido. Se trata de una mujer de 85 años que estaba ingresada en el CHOP.
La situación comenzó a empeorar de forma notable desde el pasado puente del Pilar. Solamente desde el 11 de octubre hasta ayer, día 25, se diagnosticaron 626 casos más.
Además, la curva experimentó un importante ascenso desde el pasado día 17. A partir de entonces los contagios detectados cada día han sido de una media de 50. El pico máximo se registró el pasado miércoles, 21, con 69 casos nuevos.
Tampoco hay grandes novedades en cuanto a ingresos hospitalarios por la enfermedad. Hay 49 personas hospitalizadas, ya que esta cifra se ha visto incrementada en los últimos días por los ingresos de pacientes de Oncología del Hospital Provincial afectados por un brote en el servicio que obligó su traslado a Montecelo.
La mayoría de los que necesitan ingreso están en planta, 41, que se reparten del siguiente modo: 35 en el Hospital Montecelo, cuatro en el de O Salnés y dos en el QuirónSalud Miguel Domínguez.
Sin embargo, se mantiene la cifra de siete personas que requieren de cuidados intensivos, por lo que están en la UCI.
Tal y como aseguran fuentes del servicio de Alertas Epidemiolóxicas de la provincia de Pontevedra, este aumento se debe a más de 30 brotes que han estado activos en los últimos días en el área, la mayoría de carácter familiar. En este ámbito destaca uno de 14 personas en Cuntis importado de Valladolid.
Por su parte, en el entorno laboral se informó del servicio de Oncología en el Hospital Provincial, con al menos 30 positivos, que obligó a cribar a todos los pacientes y personal del centro sanitario. Las cifras oficiales de contagios todavía no se han hecho públicas, pero se sabe que se han sometido a la prueba 200 pacientes y 1.300 profesionales.
Asimismo, en la Banda de Música de Santiago todos sus miembros están en cuarentena. Hay al menos cinco positivos del área de Pontevedra y O Salnés, ya que en la formación participan músicos de toda Galicia.
Niveles de riesgo locales
Siguen en el nivel de alerta máximo, el 3, el rojo, los municipios de Pontevedra, Marín, Poio y Vilagarcía.
En el caso de la capital de la provincia se debe a que ha registrado más de 96 casos en la última semana. De hecho, fuentes del Concello informaron ayer de que hay en su territorio 244 casos activos, 10 más que el pasado sábado.
Los otros tres ayuntamientos se encuentran en ese estado de alerta por sumar más de 21 positivos en siete días, ya que la horquilla fijada por la Xunta se mueve según la población.
Fuentes locales informaron al respecto de que en Poio hay 50 casos activos, los mismos que el sábado, mientras que en Marín hay 40.
Respecto a Vilagarcía, el pasado sábado contaba con 72 enfermos, mientras que Sanxenxo tiene 19.
Precisamente, este último concello se encuentra en el nivel de alerta 1, el amarillo, así como el de Cerdedo-Cotobade y el de Vilaboa, por sumar hasta 14 casos nuevos en una semana.
Es el mismo nivel de los municipios de Vilanova y Cambados, en O Salnés.
Por otro lado, hay dos concellos del área sanitaria en nivel 2, el naranja, Cuntis y Soutomaior, por alcanzar los 21 casos nuevos en siete días.
Las pruebas de detección del virus están siendo clave para frenar la pandemia. Desde que esta se declaró se han llevado a cabo 59.490 PCR en el área sanitaria, así como 40.120 pruebas serológicas.
2.307 superaron el virus
Asimismo, Sanidade informa de que desde que se declaró la pandemia hasta ahora se han curado en el área de Pontevedra y O Salnés 2.307 personas. Por el contrario, han fallecido 28, la mayoría con patologías previas.
En el conjunto de Galicia hay actualmente 6.431 casos activos.
Preocupación en los concellos de interior: Cuntis, Ponte Caldelas y Cerdedo-Cotobade piden “no bajar la guardia”
Una de las realidades de la expansión de la pandemia es que no entiende de fronteras. Si en el enclave de Pontevedra, Marín y Poio hay una tendencia a evolucionar de forma similar, lo mismo ocurre con el interior de la provincia. Los casos de A Estrada, Cuntis y Cerdedo-Cotobade están muy relacionados tanto por proximidad física sobre el terreno como por cuestiones burocráticas, como que son muchos los cuntienses que tienen su médico en la vecina A Estrada. Esta localidad, perteneciente al área sanitaria de Santiago, está en el nivel rojo de alerta, mientras que Cuntis en el naranja y Cerdedo-Cotobade bajó al amarillo. En todo caso, los alcaldes hacen un llamamiento a la prudencia. El de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela, instó a la “prevención y responsabilidad” de los vecinos y les recordó, a través de las redes sociales, que “estamos ante una pandemia e no debemos bajar la guardia, es un trabajo de toda la sociedad”. Los socialistas de Cerdedo-Cotobade criticaron el sistema ineficaz y lento de rastreo de la Xunta y reclamaron al Concello a que inste al gobierno autonómico a informar de los positivos diarios. Asimismo, el alcalde de Cuntis, Manuel Campos, recalca que la situación continúa sendo difícil. “Son numerosos los vecinos pendientes de realizar las PCR y unas 200 persoas están en cuarentena” . Por su parte, el de Ponte Caldelas, Andrés Díaz, pidió “no bajar la guardia” a la vista del incremento de casos en el entorno del municipio.
