El área sanitaria de Pontevedra y O Salnés roza los 50 ingresos por covid-19. Esta cifra, en ascenso en los últimos días, supone la mitad de hospitalizaciones que el pico alcanzado en la primera ola, con cerca de 90. Del casi medio centenar de afectados que necesitan tratamiento, 40 se hallan en planta y 7 en la UCI.

Montecelo y Provincial acogen a 24 pacientes, el Hospital de O Salnés asiste a cuatro y el QuirónSalud Miguel Domínguez, a otros dos. Los pacientes más graves se concentran en Montecelo.

En las últimas horas se han diagnosticado 60 nuevos contagios, de los que 58 se han confirmado mediante PCR, y se han prescrito 16 altas. Esto hace que el total de casos activos se sitúe en 683, una cifra que no ha parado de crecer desde principios de octubre.

Desde el inicio de la pandemia, el área ha notificado 3.034 personas contagiadas por el covid-19, de las 28 fallecieron. Otras 2.323 personas superaron el virus.

Las labores de rastreo mantienen unas cifras elevadas, con 879 PCR en la pasada jornada. Desde marzo se han practicado 6.369 pruebas y 40.298 test serológicos en el área, que abarca a cerca de 300.000 usuarios.  

Pontevedra, Poio y Marín, en alerta roja

La alerta roja se extiende este lunes por los concellos del fondo de la ría de Pontevedra. La capital del Lérez, Poio y Marín muestran el máximo nivel de riesgo por la propagación del virus.

Un escalón por debajo, en naranja (nivel 2), se sitúa Cuntis, donde un brote vinculado al contacto con una persona de Valladolid ha puesto en cuarentena a un centenar de personas.

Por su parte, Sanxenxo, Vilaboa, Caldas de Reis y Cerdedo-Cotobade se tintan de amarillo (nivel 1).