La situación sanitaria actual mudó muchas de las actividades, que ahora hay que adaptar. Según la última normativa de la que dispone la comunidad, la afluencia a las instalaciones deportivas está limitada a un máximo de 60 personas en recintos cerrados y de 150 en abierto. Desde la Concejalía de Deportes se trabaja en una normativa interna de uso, que establece que toda actividad o partido se celebre a puerta cerrada. Como alternativa, los concejales Antonio Caíña y Antonio Traba anuncian que estudian un sistema para ofrecer de manera telemática a los aficionados las competiciones que se desputen en las instalaciones de la villa.