El mural de la señora Lola inmortalizada en una medianera delante de Pasarón quedará finalizado, según previsión de su autor, el pintor Yoseba Muruzábal, el próximo lunes. Y será a lo largo de la próxima semana, y antes de que el Pontevedra CF juegue su primer partido de la temporada en la casa, cuando se inaugure oficialmente en un acto simbólico y con aforo muy reducido por el protocolo Covid. Tratará de dar cabida a todas las personas implicadas en el proyecto, como familiares de la señora Lola, las propietarias del edificio, el Pontevedra CF, o el fotógrafo Miguel Vidal por la cesión de una de las fotografías que sirven de modelo para el mural.
Lo anunció ayer el concejal de Memoria Histórica y Urbanismo, Xaquín Moreda, quien aseguró que "tanto por lo que supone la señora Lola como por la calidad artística del trabajo vemos que está causando mucha expectación".
Xaquín Moreda, que visitó los trabajos del mural, recordó que esta iniciativa surge como una acción transversal entre las áreas de Memoria Histórica, a través del programa "A Memoria das Mulleres" para poner en valor la biografía de mujeres de Pontevedra, y el área de Urbanismo, a través del "Plan de mellora da paisaxe urbana", para actuar sobre aquellos elementos que desentonan en el paisaje de la ciudad. En este sentido, aseguró que "la ciudad en estos últimos años cambió mucho pero con estas pequeñas acciones podemos mejorarla, y este mural servirá como prueba para posibles acciones en otras medianeras".
El pintor Yoseba Muruzábal destacó la posición del mural, y especialmente la parte derecha (mirando de cara) en la que la señora Lola queda inmortalizada mirando hacia Pasarón. "Este retrato, que es precioso, está todo el tiempo mirando para el estadio y tiene ahí como un tema de custodia del Pontevedra" afirmó.
El autor del mural aseguró que sus " pronósticos fueron acertados" respeto de la dificultad de trabajar sobre una superficie ondulada y un material como la uralita. "Era la primera vez y no sabía cómo atacarle" indicó, al tiempo que explicó que en la parte específica del retrato llegó a borrarlo cuatro veces hasta conseguir el definitivo. Volvió a recordar las diferencias de este mural sobre los que suele hacer y, a trabajar en un material ondulado, añadió no conocer personalmente a la modelo y pintar en blanco y negro. Sobre la cuestión del blanco y negro aseguró que "es más discreto pero funciona muy bien a nivel estético".
El mural, atendiendo a las características de la medianera que está dividida en dos partes, está compuesto por dos imágenes: un retrato de la señora Lola a partir de una fotografía facilitada por la familia y una imagen de la señora Lola con los brazos levantados celebrando un gol, a partir de una foto de la autoría del fotógrafo Miguel Vidal. En la imagen de la señora Lola celebrando un gol, Yoseba Muruzábal incluirá una bengala de humo, en el que será uno de los pocos elementos de color y que supondrá lo que él mismo denominó "un punto irónico, que es algo que forma parte de mi obra y eso hace que sea un poco más mía".
