La decisión del corte al tráfico de la calle Reina Victoria, que ha provocado el enfado de comerciantes y vecinos por no contar con ellos a la hora aplicar la medida, le valió al PP de Pontevedra para exigirle al alcalde que "llame al orden y controle" al concejal Demetrio Gómez, responsable de la Concellería de Obras. El pasado viernes, el nacionalista mantuvo un encuentro con representantes de colectivos empresarial de la ciudad para abordar el cierre del vial, pero este concluyó de forma abrupta al levantarse todos los portavoces sociales ante la postura inamovible de Gómez. Ayer, el portavoz popular, Rafa Domínguez, tachó su actitud de inadmisible y pidió explicaciones por la forma en la que se ha estado llevando el corte de tráfico. "Es una ofensa para todos los pontevedreses las maneras del Bloque y un menosprecio absoluto hacia los presentes, llegando a poner en su boca palabras que no habían pronunciado", aseveró.

"Culparon de no ser susceptibles con la pandemia a personas que trabajan en sectores fundamentales para el correcto desarrollo de la ciudad. Es un insulto que se les dijese que querían anteponer la economía al virus. La actitud de los nacionalistas debe cambiar radicalmente", subrayó el popular. "Le pido al concejal Demetrio Gómez que abandone la prepotencia y le recuerdo que como cargo público está al servicio de los pontevedreses y les debe respeto" matizó Domínguez, que pidió al Gobierno local que "no impongan sus decisiones" sin alternativas.

"Gómez Junquera asistió a la reunión sin vocación de escuchar ni de aceptar ninguna propuesta ni sugerencia. Parece ser que preocuparse por cómo afecta esta medida a la ciudad no les importa a los nacionalistas", lamentó Domínguez sobre la postura mantenida por el concejal, quien en dicha reunión defendió su decisión como una solución para que los estudiantes del insituto Sánchez Cantón tengan más espacio durante un curso marcado por la pandemia del Covid-19.

Ante la "falta de diálogo" y en lugar de lo que en el PP entienden como "imposición de lo ilógico", Rafa Domínguez isistió ayer en la vía de realizar un estudio específico para la zona, alternativa ofrecida en último momento a los comerciantes. "Van tarde y mal, y están causando un daño irreparable en el comercio local", lamentó el portavoz del PP.

"En una situación tan crítica para muchos de los asistentes es una falta de educación y empatía que no se puede consentir. En el BNG no les bastaba con arruinarlos, también les gusta faltarles al respeto y reírse en sus caras" denunció Domínguez. El popular se mostró convencido de que el grupo de gobierno "sostiene un plan para que la gente no venga a nuestra ciudad: con decisiones como esta y con esta falta de diálogo lo que están consiguiendo que cada vez más personas se vayan a otras ciudades".