Más de noventa años después de que se rodase, Filmoteca Española recupera el color original de la primera versión de "Pontevedra, cuna de Colón (1927)", un cortometraje documental del fotógrafo, cineasta e investigador cinematográfico pintevedrés Enrique Barreiro. Se trata de la primera película rodada en color en España, gracias a un sistema experimental patentado por el propio Barreiro en 1925: el cromacolor, el antecesor del tecnicolor.

El estreno de la versión restaurada tendrá lugar en octubre, coincidiendo con el "mes del archivo", y forma parte de una serie de actividades organizadas por la institución. El día 1 llega al Cine Doré y el 29 será accesible de forma online. También se proyectará en el CGAI, la filmoteca gallega, el 27 de octubre.

"La importancia de este título estriba en que responde a las innovaciones introducidas para la obtención de cine en color por Enrique Barreiro, y esa posibilidad de disfrutar del color no se había conseguido hasta el momento en España", explica Marián del Egido, directora del Centro de Conservación y Restauración de Filmoteca Española.

Si bien la presencia de color no es extraña en materiales antiguos, lo habitual era que, salvo en los casos en los que eran pintadas a mano, las secuencias se tiñesen enteras de un mismo color.

Cromacolor

La excepcionalidad de "Pontevedra, cuna de Colón", radica precisamente en el sistema empleado: el cromacolor. Este consistía en un filtro rotatorio que consta de una parte de color rojo anaranjado con una franja carmín violeta y otra parte amarillo-verde con una franja azul. Se iba capturando la respuesta a estos colores en el negativo en fotogramas alternos, primero al pasar la imagen por el filtro rojizo y, en el siguiente fotograma, al pasar por el filtro verdoso. Una vez revelada la película, se teñían los fotogramas alternativamente de un color carmín o rojo y de color verde con matices azules, de modo que, al proyectarlos a gran velocidad, la persistencia de la retina se encargaba de realizar la mezcla y ver la imagen en color.

Digitalización

Al revisar el material, se comprobó que los colores aparecían degradados debido al paso del tiempo. Cuando se llevó a cabo la digitalización se restituyeron estos tonos fotograma a fotograma, pero al proyectar la cinta no se producía la mezcla de colores.

20.000 fotogramas

El sistema, tal y como explicaba Barreiro en sus patentes, no arrojaba los resultados deseados. No obstante, como la información del color sí estaba disponible en los fotogramas, se podía recrear el color empleando otra estrategia: superponer manualmente cada pareja de fotogramas una vez restablecido el color rojo y verde azulado. El proceso requirió tratar manualmente en mayor o menor medida 20.000 de los 33.000 fotogramas que componen la película.

Esta recuperación ha sido posible gracias a la colaboración entre Filmoteca Española y el Centro Galego de Artes da Imaxe-Filmoteca de Galicia, y forma parte de un proyecto en el que se pretende abordar de forma conjunta los materiales que forman la colección de Barreiro, depositada por la familia del cineasta en la entidad gallega.

Barreiro fue una de las figuras más importantes de la década los años veinte dentro de la cinematografía gallega del momento, quien a lo largo de su vida experimentó con múltiples sistemas para dotar de color la imagen cinematográfica.