Las Fuerzas Armadas vuelven a entrar de lleno en la lucha para frenar el avance de la pandemia en Galicia. El general de la Brilat, Luis Cortés Delgado, explicó ayer al delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, y a la subdelegada en Pontevedra, Maica Larriba, los pormenores de la "Operación Baluarte", o lo que es lo mismo, cómo va a funcionar el dispositivo de rastreo que van a efectuar en la comunidad autónoma miembros de la Brigada Galicia VII y de la Armada.
Hoy se cumple un mes desde que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciase a las comunidades autónomas que tenían a su disposición a los efectivos de las Fuerzas Armadas para colaborar en esta labor de rastreo de los contactos estrechos de los positivos por coronavirus. Galicia ha solicitado esta colaboración y ahora se ponen a disposición del Sergas estos 205 militares en función de las necesidades y objetivos que trasladados por la propia Xunta.
En total, según el delegado del Gobierno, serán un total de 180 rastreadores de la Brilat y de la Armada los que realizarán estas labores de búsqueda de contactos de positivos por Covid-19 en toda Galicia. No obstante, el número de militares que se involucrarán en el será mayor, según precisan fuentes de la Brilat. Además de los rastreadores propiamente dichos, y sumando los efectivos que van a realizar labores de coordinación y mando, el número total de militares que participarán en las labores de rastreo en Galicia será de 205 (135 de la Brilat y 205 de la Armada). De todos estos, 135 pertenecen a la Brilat y otros 70 a la Armada (60 del Arsenal de Infantería de Marina de Ferrol y 10 de la Escuela Naval Militar de Marín).
Coordinados con el Sergas
Trabajarán de manera coordinada con el Sergas, mientras la Xunta lo demande, desde la Unidad de Vigilancia Epidemiológica establecida en la base General Morillo de Figueirido. Son tres turnos, con pelotones de 40 militares cada uno. Dos de ellos trabajarán en horario ininterrumpido de 9 a 22 horas de lunes a domingo, en turnos de tarde y de mañana. Habrá un tercer turno de descanso que permitirá hacer los relevos y mantener la actividad de rastreo los siete días de la semana.
El objetivo es centrarse en colectivos específicos, grandes empresas y brotes virulentos. Ahora mismo, los militares se encuentran terminando su fase de formación (Ahora mismo se centran en el software que usarán para estar en comunicación con el Sergas) y se prevé que puedan comenzar la actividad el lunes si el Sergas les proporciona los primeros datos para realizar el rastreo. La Xunta irá facilitando la información y datos de los contactos de positivos que deben rastrear.
La Brilat no solo se ocupará del rastreo en Galicia. También asume el mando de esta operación militar en Asturias, desde su base en Siero. Allí están ya trabajando en estas labores de búsqueda de contactos de positivos desde hace una semana y actualmente su ritmo es de unos 100 contactos al día con un equipo de tan solo 20 militares por turno, es decir, la mitad que aquí. Es por ello que fuentes de la Brilat calculan que la capacidad de los equipos que se van a poner en marcha en Galicia sea de unos 200 contactos al día, o incluso más en cuanto todo el engranaje se vaya engrasando. En Castilla y León aportan también personal a un operativo que dirige la División San Marcial, con sede en Burgos. En total, en las tres comunidades, la Brigada Galicia VII aporta un total de 280 militares para esta "Operación Baluarte".
Tanto el general Luis Cortés Delgado como el delegado del Gobierno, Javier Losada, insistieron en que el dispositivo se puede ampliar si así lo requiere la Comunidad Autónoma en función de la evolución de la pandemia y que se están formando a más efectivos por si fuera necesaria su incorporación a este operativo.
Despliegue del Ejército
El delegado del Gobierno aprovechó esta visita a la base militar General Morillo para poner en valor el trabajo de las Fuerzas Armadas durante la pandemia con la Operación Balmis. De hecho, realizaron más de 400 desinfecciones de infraestructuras críticas y residencias de mayores, la mayoría de ellas a cargo de la Brigada Galicia. De hecho, el general Cortés explicó que todavía siguen en alerta y con capacidad para volver a desplegar los equipos de desinfección de inmediato si así se requiriese por las autoridades.
Losada también insistió en que la puesta a disposición de la Xunta de "esta herramienta" para combatir la expansión de la Covid-19 es otra muestra del "compromiso" del Gobierno central con Galicia y con la "cogobernanza" con la comunidad autónoma, que tiene el mando único en la gestión sanitaria de la pandemia, recordó.
Según explicó inyecto de manera directa unos 2.000 millones de euros a Galicia y señala que el impacto económico global de las diversas medidas aprobadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez supone 8.000 millones de euros para la comunidad, al sumar los 4.804 millones de euros de avalas a 32.000 empresas gallegas.
