El Concello de Pontevedra ha dado un paso más en la adopción de medidas que permitan adaptar el espacio público de la ciudad a las necesidades generadas por la pandemia de la Covid-19. En este caso, el gobierno local ha decidido poner el espacio público de los entornos de los centros educativos a disposición de colegios e institutos para colaborar en la medida de lo posible a mantener las distancias de seguridad y evitar la aglomeración de alumnos y padres en las entradas y salidas. Así como aumentar la disponibilidad de espacios para los recreos, por ejemplo.

El primer resultado de esta medida es el corte al tráfico rodado de "manera permanente" de la calle Reina Victoria para favorecer el acceso, salida y recreos de los alumnos del instituto Sánchez Cantón. Dado que el inicio de las clases está previsto para el miércoles, el Concello estudia cortar ese mismo día esa céntrica calle. La medida se puede llevar a cabo fácilmente debido a la experiencia con la que cuenta el Concello en este caso, puesto que es el mismo corte de tráfico que se realiza con motivo de las fiestas de A Peregrina para albergar a las atracciones de feria.

Se instalarán bolardos para impedir el tráfico rodado entre el aparcamiento de la Alameda, que permanecerá operativo, así como Palamios y Pastor Díaz. Los coches también podrán circular desde Palamios hacia Campolongo.

La medida la presentaron ayer los concejales de Infraestructuras Urbanas y de Mobilidade, César Mosquera y Demetrio Gómez, señalando que cuentan con el visto bueno de la Fanpa, la Anpa y la dirección del centro. Añadieron que esta es una oportunidad abierta ahora a todos los centros de Pontevedra en los que sea posible llevar a cabo medidas similares. Ya hay colegios, como Barcelos o San José o el IES Valle Inclán, que están echando mano de espacios peatonales para sus recreos, pero ahora el gobierno local abre la puerta a que se solicite también el uso del espacio utilizado por el tráfico rodado. Ambos concejales sí reconocieron que adoptarán estas medidas siempre contando con el visto bueno de los centros y tras realizar un estudio de viabilidad de las restricciones que se plantean. "Se extenderá a todos los colegios si tienen esa necesidad"; indicó Mosquera, aunque habrá que comprobar si la incorporación de esos espacios públicos para uso de los centros escolares "es operativa o viable" antes de ponerla en marcha.

Mosquera reconoció que se barajaron otras opciones como los cortes puntuales de tráfico, por ejemplo, a las entradas o salidas o durante los recreos. El concejal explicó que, teniendo en cuenta las entradas y salidas escalonadas que están programando los centros esta opción quedó descartada dado que sería un "infierno". No sería viable "un corte de 40 minutos a la entrada, otro de 40 minutos a la salida y otro de una hora para el recreo", ya que no solo generaría más desconcierto al tráfico rodado sino que requería de un operativo inasumible.