La gestión del comienzo del curso escolar es "manifiestamente mejorable", criticó el alcalde de Pontevedra, Miguel Lores, tras conocer el cierre del colegio Calasancio por casos de Covid-19 entre su profesorado. El regidor entiende que no será el único centro que cerrará. "Estaba previsto que ocurriese esto y habrá más casos", lamentó.

El teniente de alcalde y concejal de Educación, Agustín Fernández, reclamó por su parte a la Xunta de Galicia, como administración competente en esta materia, que "asuma sus responsabilidades, se deje de derivarlas a otras administraciones y tome decisiones". El concejal socialista también reclamó al Gobierno gallego "criterios estables" ante este problema, "que no varíen de un día para otro". Fernández entiende que en el inicio del curso escolar hubo una "abundante dosis de improvisación", con los problemas que ya se están evidenciando en los diferentes centros y niveles educativos.

Reunión con el Sergas

El alcalde Lores, que ayer mantuvo una reunión telemática con el gerente del área sanitaria de Pontevedra y con otros alcaldes de la zona (Marín, Poio y Vilaboa), lamentó que "estuvimos a ciegas durante mucho tiempo, sin ningún tipo de información, ahora nos están dando algo de información y espero que sigan dándola y que todas estas medidas puedan servir para que baje la curva".

El alcalde de Pontevedra criticó que "nos imponen restricciones de tipo general cuando ya se abrieron los colegios, eso es una contradicción; todos queremos que los niños vuelvan al colegio, que se recupere la actividad económica, etc., pero si no hacemos las cosas bien desde el principio a lo mejor lo estamos haciendo peor, por abrir los colegios sin las debidas medidas de seguridad, produciéndose nuevos contagios, con lo que al final vamos a estar perdiendo el tiempo", expuso Lores, para quien "hubo tiempo para tomar medidas antes y aquí se está haciendo al revés, tomando las medidas después de abrir" los colegios.

En todo caso, para el alcalde de Pontevedra la decisión de cerrar el colegio Calasancio "es inevitable", dijo, ante la situación sanitaria. "Pero lo que no es inevitable es prever que no pasen estas cosas", añadió.

En alusión a este problema, para el socialista Tino Fernández "lo que nos preocupa es que esto pueda provocar un incremento de positivos, dado que los chavales se mezclan y tienen contacto", argumenta el edil de Educación. El teniente de alcalde socialista reclamó al gobierno de la Xunta "que se comporte, que deje de lado las críticas partidistas y asuman sus responsabilidades". Fernández recordó que el Concello de Pontevedra acaba de destinar 300.000 euros a la limpieza y desinfección de los colegios cuando es una competencia de la Xunta. En todo caso añadió que "desde el Concello estamos abiertos a todo tipo de cooperación con la Xunta de Galicia siempre que hable con nosotros".