El presidente de la Asociación de Empresarios de la Pequeña e Mediana Empresa de Pontevedra (Aempe) reclama "previsión y certidumbre" para aminorar al menos los efectos de la actual crisis.

- ¿Cómo se siente el empresariado pontevedrés ante la actual situación?

- Tenemos un manifiesto cabreo desde el mundo empresarial, principalmente por la desorganización y a la falta de previsión que se evidencia en todo esto. El problema sanitario está ahí, lo sabemos y somos conscientes de que es difícil luchar contra él, pero el mundo empresarial necesita previsión, certidumbre, al menos algunas estrategias a seguir según lo que venga, porque las consecuencias de todo esto sobre la economía pueden ser mortales.

- ¿Cuántas empresas han cerrado en Pontevedra en lo que llevamos de crisis?

- No tenemos las cifras porque nadie nos las facilita, pero es evidente que se han cerrado empresas. En Pontevedra hay negocios que no han vuelto a abrir desde el primer confinamiento porque no han podido resistir las consecuencias, principalmente en el sector servicios, que vive principalmente de estos meses de verano. Y me pone los pelos de punta ver tanto pasotismo con esta crisis. Deberían tener un poco más de previsión sobre las consecuencias futuras que puede acarrear todo esto.