Un incendio forestal que se declaró en unas fincas de A Gándara en Lérez, pero que discurrió muy próximo a esta zona habitada puso en peligro al menos dos viviendas de este núcleo de la ciudad de Pontevedra. De hecho, tanto es así que Sabino Outeda, propietario de una de las dos viviendas afectadas, explicaba ayer tarde a FARO que en un momento dado "temimos que se pudiera llevar por delante la casa".

Según indicó este testigo, el fuego se declaró sobre las cuatro de la tarde en estas fincas de matorral en la zona de A Gándara, en Lérez, en el entorno de la Xunqueira de Alba.

El fuerte viento y el ambiente seco provocaron que las llamas "corriesen muy rápido paralelas a la línea del ferrocarril" hasta situarse justo detrás de esas dos viviendas, los números 64 y 62 de A Gándara. Sus ocupantes -en el caso de Sabino Outeda él su mujer, sus dos hijos y su suegra de más de 80 años- tuvieron que abandonar a toda prisa la vivienda ante el temor de que pudiera resultar afectada.

Después de dar aviso a las autoridades, Sabino se sumó a los primeros policías que acudieron a la llamada y que, al ver las llamas tan cerca de la casa, comenzaron a luchar contra el fuego con mangueras y cubos de agua. Incluso un peregrino que pasaba por el cercano Camino Portugués a Santiago se incorporó a las labores para intentar sofocar el incendio sin pensárselo dos veces. Aunque las llamas no afectaron a la vivienda, sí que se llevaron por delante un galpón en donde este vecino guardaba aperos de labranza y algo de combustible.

Este vecino se queja de la tardanza en llegar de las cuadrillas de bomberos y agentes forestales. Los bomberos de Pontevedra recibieron la llamada para proteger estas viviendas justo cuando se encontraban atendiendo el grave accidente de tráfico que se produjo en la carretera de Vilagarcía. Una vez que comprobaron que la víctima de este siniestro había fallecido, desviaron al incendio a varios efectivos que protegieron la vivienda de las llamas y enfriaron la zona.

El fuego se extendió después por la zona de A Gándara hacia Médico Ballina en donde trabajaron en su extinción las cuadrillas de Medio Rural con el apoyo de un helicóptero. A la zona también se trasladó Policía Local y Nacional de Pontevedra.