El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) anunció ayer la licitación del contrato de suministro de los equipos necesarios para la puesta en servicio de la subestación eléctrica del Eje Atlántico Ferroviario entre A Coruña y Vigo. Se trata de una infraestructura tan imprescindible para mejorar las prestaciones del Eje Atlántico como polémica, dado que generó movilizaciones vecinales en su contra. Ahora, finalmente, parece que será una realidad en breve.

De la importancia de esta actuación da también cuenta el elevado importe de la licitación, por más de 8,6 millones de euros en la instalación de todo el equipamiento de esta infraestructura así como las pruebas pertinentes para su puesta en marcha. La construcción de esta subestación había generado dudas entre los vecinos, que incluso intentaron parar el proyecto por la vía del Contencioso-Administrativo. El TSXG no les dio la razón, el Supremo ratificó el fallo del Tribunal Superior y la obra cuenta con todas las autorizaciones y licencias necesarias. De hecho, ya se está ejecutando lo que sería el continente de la subestación y ahora se licita el contenido, todo el equipamiento para que funcione.

¿Por qué es tan importante esta subestación? Según explicaron técnicos de Adif en una visita en 2018 a Pontevedra, la subestación es "imprescindible" para la llegada del AVE a la provincia.

El Eje Atlántico cuenta con una longitud de 155 kilómetros y sin esta de Bértola habría solo dos subestaciones en funcionamiento, ambas, en la provincia de A Coruña, y ninguna entre Santiago y Vigo, un tramo de 94 kilómetros, a pesar de que una infraestructura ferroviaria de las características del Eje Atlántico "precisa una subestación cada 70 kilómetros". Ahora la instalación está funcionando como un centro de autotransformación intermedio para la alimentación eléctrica del Eje Atlántico. Entre otras ventajas, no solo aumentaría la fiabilidad del eje ferroviario en el sur de Galicia en caso de una avería, sino que también permitiría, por ejemplo, aumentar la frecuencia de trenes que circular a la vez por las vías del sur gallego.

Según se explicó en su día, la subestación está además "encapsulada y blindada" hacia el exterior y rodeada de una pantalla vegetal.