El área sanitaria de Pontevedra-O Salnés implementó ayer un programa de atención psicológica para los sanitarios que sufren los efectos de estado de alarma; médicos, enfermeras, técnicos etc que están en primera línea ejerciendo en las unidades hospitalarias o en Atención Primaria y que demandan una consulta derivada del actual escenario de lucha contra la epidemia.

La atención psicológica se lleva a cabo vía telefónica, un paso previo para una hipotética consulta mediante videoconferencia o presencial en caso de que los profesionales así lo considerasen por el estado del paciente, la necesidad de revisar medicaciones o cualquier otro requisito que lo exija.

El programa se desarrolla desde los centros de salud de Lérez y Moballao (Casa do Mar) para los profesionales que ejercen en Primaria, y desde el Provincial y Montecelo para los asignados a unidades hospitalarias. Su objetivo es atender una demanda que, por anteriores experiencias de pandemias, aparecerá en breve por parte de quienes ven directamente y en primer lugar los efectos más nocivos del virus.

En una segunda fase, la previsión es extender este programa de ayuda psicológica al conjunto de la población, si bien se llevaría a cabo a través de los centros de Atención Primaria.

Se han elaborado protocolos para intervenir tanto sobre los sanitarios como sobre la población en general. También se ha habilitado un teléfono de asistencia y se asignaron psicólogos a este nuevo protocolo. Los profesionales de las unidades de salud mental atienden consultas telefónicas y están abiertos "a que a través de los centros de salud se pueda consultar con nosotros", indican los responsables del programa.