Se presentan por decenas cada día, pero nunca sale a la luz su número y clasificación por servicios; al menos no por parte de fuentes oficiales. Son las reclamaciones de los pacientes en el ámbito de la sanidad. La asociación a nivel nacional Defensor del Paciente ha hecho público su último informe, el referido al año 2019, en el que se recoge que ha tratado 259 casos en la provincia de Pontevedra.
En el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés, las cuestiones más denunciadas por los pacientes son las largas esperas en el servicio de Urgencias del Hospital Montecelo, que en días determinados superan las 24 horas; las cuatro que se dan en la sala previa a recibir la quimioterapia en el Hospital Provincial, y las listas de espera para consultas e intervenciones quirúrgicas, que se "camuflan" dejando las citas en un limbo hasta que se abren las listas, meses después.
"La gestión en el Servizo Galego de Saúde, Sergas, deja mucho que desear desde hace años. Las listas de espera, las Urgencias, la falta de personal... desesperan a los usuarios, que se ponen en contacto con nosotros", asegura Carmen Flores, presidenta de la asociación Defensor del Paciente.
Completan el listado en Pontevedra las reclamaciones relativas a la Cirugía General, Traumatología y Ginecología y Obstetricia.
"En otros países se publican cada año las reclamaciones que presentan los pacientes, pero aquí no. Feijóo debería entonar un mea culpa", considera Flores.
En este sentido, destaca que una de las grandes perjudicadas es la sanidad del rural, a donde ni siquiera llegan los servicios adecuados ni el personal necesario para la atención de la población.
"Los médicos se quejan también, con razón", añade.
Según del Defensor del Paciente, el Complexo Hospitalario de Pontevedra ocupa el cuarto lugar en denuncias por parte de usuarios.
Negligencias
El informe de la asociación asegura que Galicia es la sexta comunidad más denunciada en materia de casos de negligencia médico-sanitaria.
"Por las reclamaciones que hemos recibido, constatamos que en Galicia se ha llamado a pacientes que estaban en demora quirúrgica para informarles de que las agendas estaban cerradas y que cuando volvieran a estar abiertas ya se les avisaría; claro está desapareciendo de las mismas mientras tanto, ése es el truco. Otra opción es que acepten ir a una clínica particular, es decir, la finalidad del Sergas no es otra que la de terminar privatizando la sanidad pública", denuncia el Defensor del Paciente respecto a las listas falsas de espera.
