Más de un centenar de comensales disfrutan este día de Nochebuena de un almuerzo muy especial en el comedor social del convento de San Francisco de Pontevedra, en donde el chef Pepe Vieira y su equipo sirven un almuerzo a las decenas de usuarios de este servicio que lleva horas en plena ebullición.

El chef estrella Michelín y una decena de ayudantes están sustituyendo por unas horas a los colaboradores que trabajan habitualmente en la cocina, mientras que en el comedor se afanan siete voluntarios para servir a un amplio abanico de comensales. "Tenemos desde chicos jóvenes a familias que están todos los miembros en paro", resumen colaboradores como Conchi Beloso, que ayuda desde hace más de 30 años en el comedor social.

El menú habitual del comedor en el almuerzo de Nochebuena se sustituye hoy por una selección de platos elegidos por el chef: calabacín relleno de bacalao al ajoarriero, canelones de capón con setas y trufa y un tronco de Navidad de postre. Por su parte, el chef reemplaza esta mañana su gorro clásico por uno de Papá Noel, pero lo que no cambia es el estrés, las carreras y los apremios en la cocina para abastecer a las decenas de usuarios.

Estos comensales (muchos de ellos menores) entran en grupos de 66 y en la cocina trabaja el equipo profesional dando los últimos toques a los menús y emplatando.

"Nos han dicho que está muy bueno, que se lo dejemos saborear", ha sido la impresión que trasmiten los primeros participantes en el almuerzo solidario, mientras que en la puerta del comedor social esperan decenas de usuarios (de nuevo entre ellos muchas familias con niños) para el siguiente turno. La previsión es que se acepten turnos hasta el cierre alrededor de las 15 horas.