El gobierno local de Moraña está perfilando todos los detalles para acometer, desde el próximo año, una remodelación integral de la casa consistorial y la humanización de su plaza anexa. Pretenden cerrar diversas cuestiones sobre este proyecto en los próximos días con el objetivo de incluirlo en el Plan de Inversiones de los Presupuestos Municipales 2020, actualmente en su fase final de elaboración. La alcaldesa de Moraña, Luisa Piñeiro, explicó que el consistorio está "completamente obsoleto" y presenta muchas deficiencias para atender adecuadamente a los vecinos, ya que todas las dependencias, excepto Servicios Sociales, el CIM y el salón de plenos, están en el primer piso y no hay ascensor, lo cual dificulta la atención de personas mayores, con discapacidad o con problemas de movilidad.

La remodelación "lleva sobre la mesa mucho tiempo y siempre se retrasó para atender otras prioridades, pero llegó el momento de acometerla porque el edificio es ineficiente y inoperativo para la ciudadanía y los trabajadores municipales", detalló Piñeiro, que explicó que la reforma, que podría contemplar una ampliación para ganar superficie, pretende convertir el inmueble "en un lugar más espacioso, cómodo y que respete y favorezca la accesibilidad". Dado que las obras podrían afectar al entorno del consistorio, el gobierno también proyecto una cierta humanización y mejora estética de la plaza anexa. Una de las cuestiones importantes para la ejecución de este doble proyecto pasa por la consecución de la financiación, en la que se está trabajando en estos días, aunque la principal posibilidad pasa por la Xunta de Galicia, ya que el vicepresidente gallego, Alfonso Rueda, ya anunció, en una visita realizada a Moraña "la una obra muy necesaria que estamos en condiciones de afrontar cuándo sea justificada, como es este caso".