Unión Fenosa Distribución (UFD), distribuidora eléctrica del Grupo Naturgy, continúa trabajando en las mejoras necesarias para solventar los cortes de luz ocurridos en el centro de Pontevedra en las últimas semanas. La empresa está desarrollando un plan de mejoras en varios puntos del municipio, para evitar que estos apagones se vuelvan a producir. UFD explica que está invirtiendo en torno a un millón de euros en un plan de actuaciones y obras para el impulso de la calidad del suministro eléctrico en la ciudad, "cumpliendo con el compromiso adquirido con la Xunta de Galicia y el Concello de Pontevedra".
La compañía explica que el plan de robustecimiento de la red eléctrica incluye 18 actuaciones, de las cuales 5 ya se acometieron en las últimas semanas. Este plan está "en continua revisión" para incorporar nuevas necesidades que surjan.
En concreto, la compañía explica que ya ha realizado trabajos de mejora en los transformadores de Barcelos, Lepanto, Carabelos, Estribela y zona del Muelle. Actualmente, están en ejecución las obras en San Antoniño y está previsto ejecutar los trabajos en las calles Cruz Gallastegui, Joaquin Costa y zona Diputación en diciembre. El resto de los trabajos están, en su mayoría, pendientes de obtener los permisos necesarios para su ejecución y de la recepción de materiales singulares, aunque la previsión es desarrollarlos, principalmente, durante el primer trimestre 2020. "Hay que destacar que, aunque este tipo de actuaciones requiere, normalmente, de meses de tramitación y ejecución, UFD está desarrollando el plan en tiempo récord para cumplir con los compromisos adquiridos, con el apoyo de las administraciones", afirma la empresa.
UFD añade que ha lanzado, desde el mes de agosto, un plan de choque de revisiones visuales preventivas para detectar cualquier anomalía que pudiera desencadenar un fallo. Así, se abren arquetas de cable en la vía pública y se revisarán unos 500 centros de transformación por todo el casco urbano y con el objetivo de barrer toda la ciudad.
Por otro lado, en caso de avería, la inversión en automatización de la red permite la maniobra a distancia de interruptores de 15.000 voltios para localizar más rápidamente el punto de la incidencia y disminuir tiempos de interrupción.
