La Guardia Civil celebró este 12 de octubre el día de su patrona con un acto solemne en la Comandancia de Pontevedra, en el que se impusieron medallas a algunos agentes destacados de éste y otros cuerpos de seguridad. Entre otros, se condecoró con la cruz del mérito militar con distintivo blanco al capitán Alfredo Castro Pérez y a los guardias civiles Francisco Hierro Pérez y Juan Carlos Castro Agrelo.

Además fue condecorada con la cruz de plata de la orden del mérito del cuerpo de la Guardia Civil Marta Padín González, y con la cruz de la orden del mérito de la Guardia Civil con distintivo rojo el guardia Amancio González Gómez, que hace más de cuarenta años repelió un ataque de la organización terrorista Grapo, en el que resultó herido un compañero.

Recibieron la cruz de la orden del mérito del cuerpo de la Guardia Civil con distintivo rojo la secretaria general de la Subdelegación del Gobierno, María Isabel Alonso de Linaje Calzada, el fiscal del área de Vigo Juan Antonio Sagrado Cañavete, el jefe de la Policía Local de Vigo Francisco Martínez Muñoz, la ex jefa de Inspección Farmacéutica y Control de Drogas en Vigo María Luz Senra Lorenzo, el teniente coronel del Ejército, José María Leira Neira, el sargento Primero del Ejército de la Jefatura de Asuntos Económicos del FLO Jorge Álvarez Cea y el sargento ayudante de la Guardia Civil Nacional Republicana del CCPA de Tui Felipe Laa Pires. También fueron condecorados otros 27 guardias civiles.

La subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba, presidió los actos acompañada del jefe accidental de la Comandancia, el teniente coronel Manuel Touceda, quien destacó en su intervención que en esta comandancia se esclarecen casi el 56 por ciento de los delitos, cuando en el conjunto del territorio nacional el porcentaje es del 41%.

Los 1.438 guardias civiles destinados a la Comandancia de Pontevedra hacen más de 44.000 patrullas al año, recorren más de 5,5 millones de kilómetros y realizan entorno a 8.000 vigilancias sobre víctimas de violencia de género, apuntó el teniente coronel Touceda.

La subdelegada del Gobierno quiso recordar "los enormes desafíos que tenemos por delante", en los que la Guardia Civil tiene un papel fundamental. Al respecto matizó temas tan sustanciales como la emergencia climática y sus consecuencias ambientales, la seguridad viaria, la persecución del narcotráfico o la implicación en la lucha contra la violencia machista.

Maica Larriba subrayó "el importante trabajo de la agrupación de tráfico que gracias a los controles en los meses estivales, se consiguió un descenso del casi 75% en cuanto a fallecidos en la carretera durante los meses de este verano".

Igualmente, la subdelegada del Gobierno recordó el importante trabajo del cuerpo del Seprona, tan vinculado al medio ambiente y a la emergencia climática global que tanto nos preocupa. El trabajo intenso en la vigilancia e investigación sobre los incendios, son garantía "para la conservación de nuestra riqueza natural y para el futuro de las generaciones próximas".

Tampoco quiso olvidar "los importantes resultados conseguidos en la persecución del narcotráfico, el menudeo y la venta a pequeña escala de estupefacientes, garantizando un avance en la seguridad de nuestra sociedad".

Finalmente, Maica Larriba incidió "en la necesaria implicación de todos los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en un tema tan preocupante como la violencia machista para que, junto a la implicación de toda la sociedad, podamos borrar de nuestros discursos las referencias la este doloroso problema vital para muchas mujeres y con el recuerdo, aun tan reciente, de las cuatro víctimas asesinadas en nuestra provincia en el que llevamos de 2019".