El Pleno de Ponte Caldelas adjudicó ayer, en sesión extraordinaria, el Servicio de Ayuda en el Hogar (SAF) para los dos próximos años con un importe de 242.595 euros anuales. El acuerdo se adoptó con los votos favorables del PSdeG-PSOE y la abstención del PP y el BNG.

La empresa adjudicataria, Edades S.L., se comprometió a la subrogación de las 13 trabajadoras y se comprometió la una serie de prestaciones que superen una clara mejora en la calidad del servicio, del que se benefician actualmente 34 personas mayores, de ellas 26 con declaración de dependencia y las otras 8 en la modalidad de libre acceso.

El acuerdo debió ser aprobado en Pleno al superar el 10% de los recursos comunes. Precisamente, este servicio se convierte en el más costoso de los que presta el Concello, por delante del de recogida de basura.

Esta situación provocó la intervención del alcalde, quien recordó que el SAF es una competencia exclusiva de la Xunta de Galicia, que solo asume en torno al 65% de su coste a través del pago de un módulo por hora de servicio que resulta completamente insuficiente. Una situación, que según el gobierno local, "está suponiendo un grave perjuicio económico a los ayuntamientos y que está motivando un fuerte debate en el campo local".

El problema, añadió Díaz, se agravó por los cambios en la regulación laboral, entre otras cosas con la aprobación del nuevo salario mínimo interprofesional.