Catorce meses después de haberlo solicitado sin recibir respuesta, el gobierno local de Ponte Caldelas se dirige de nuevo a la Consellería de Infraestruturas para pedir que se transfiera al Concello la carretera PO-180, un sobrante de la carretera autonómica PO-532 a su paso por Vilarchán. El alcalde, Andrés Díaz denuncia el "abandono total" de este vial que forma parte del trazado viejo de la carretera entre Pontevedra y Ponte Caldelas, lo que provoca muchas quejas de los vecinos, por lo que fue el Concello el que repara los baches, aunque la intención es acometer un proyecto integral si se produce la cesión. Díaz, lamenta que la consellería no dé respuesta en 14 meses, más aún cuando tan sólo se solicitó la transferencia, sin reclamar el arreglo integral previo.