La Policía Nacional detuvo en Marín a dos hombres, acusados de sendos delitos de violencia de género, en dos situaciones diferentes.

En el primero de los casos, los agentes de la Policía Autonómica detuvieron a un varón por un presunto delito de violencia de género hacia su expareja. Miembros del Grupo de Prevención, Asistencia y Protección a las Víctimas de Violencia de Género de Pontevedra procedieron a la detención de este hombre como presunto autor de un delito de violencia de género, concretamente por incumplimiento de la orden de alejamiento.

Los agentes tuvieron conocimiento de que en la localidad se estaba produciendo una situación de acoso de un varón hacia su exmujer, realizando varias maniobras peligrosas con el vehículo en el que se desplazaba, llegando la víctima a temer por su vida. Igualmente fueron informados de que la requiriente tiene una orden de protección en vigor decretada por el Juzgado de Instrucción número 1 de la misma localidad.

Trasladados a la zona, los agentes localizaron el vehículo en Marín, procediendo a la detención del individuo, que fue trasladado a la Comisaría de la Policía Nacional para la instrucción de las oportunas diligencias.

Ante la situación de riesgo y conducción temeraria que el presentado como detenido había causado a su exmujer, fue sometido a un test de drogas y alcohol, dando positivo en el primero de ellos. Una vez finalizada la instrucción del atestado, se remitió al Juzgado de Guardia de Marín.

Actualmente, la Unidad de la Policía Autonómica tiene asignada la protección de un total de 271 mujeres víctimas de violencia de género.

En la jornada de ayer, otro varón de unos sesenta años fue también detenido en la calle Ezequiel Massoni, acusado de violencia de género hacia su cónyuge, en una actuación en la que tuvieron que intervenir, además de los agentes de Policía, los bomberos. El acusado había abierto el gas en el inmueble en el momento en que fue detenido. Fuentes oficiales informaron de que esta acción finalmente no produjo víctimas ni heridos.

La Policía detuvo al supuesto autor del delito de violencia de género que fue interrogado en Comisaría para posteriormente ser puesto a disposición judicial.

Fue la propia mujer quien pidió auxilio en un bar situado bajo la vivienda, mientras el hombre abría las espitas del gas en el domicilio, donde fue localizado.