El abogado de Ángel Martínez Pérez, planteó otras tres cuestiones previas antes de que el tribunal suspendiese el juicio, más allá del estado de salud de su cliente y de la posible prescripción de los delitos referidos a 2009.

Una de ellas va a centrar buena parte de la batalla en este juicio contra el magnate de las orquestas gallego: Es la validez del registro que se efectuó en las dependencias de las empresas del grupo Lito y que en otro de los procedimentos seguidos ante el juzgado de lo Penal fue declarado nulo.

Piden la nulidad

La defensa pretende extender esa nulidad al resto de causas y dejar así sin prueba a las acusaciones, que encontraron en ese registro cuantioso material sobre la gran cantidad de operaciones en "b" que realizaban las empresas del grupo (y se podría decir que casi todo el sector de las orquestas) en aquella época. Ayer, volvió a pedir la nulidad de dicho registro, cuya legalidad defienden también a capa y espada la Fiscalía y la Abogacía del Estado.

El fiscal del caso, Alejandro Pazos, consciente de la resolución dictada en su día por el juzgado de lo Penal, está tratando de apuntalar la validez del registro con la introducción de más documentación sobre aquel registro y solicitó dos nuevas testificales de los técnicos de Hacienda que participaron en el mismo y con el objetivo de refrendar ante el tribunal que no hubo ningún tipo de irregularidad ni ruptura de la cadena de custodia del material intervenido en aquel registro, por lo que debe considerarse válido.