Imponen una multa de mil euros al piloto de un patinete eléctrico que triplicaba la tasa de alcohol

Los hechos se produjeron a primera hora de la tarde cuando varias personas observaron como este joven circulaba con su patinete por la plaza de Curros Enríquez, y vieron que lo hacía dando bandazos y de manera errática. De hecho, en un momento dado incluso se cayó al suelo, razón por la cual solicitaron la presencia de la Policía Local.

Ante los evidentes síntomas de embriaguez, los agentes practicaron la prueba de la alcoholemia al piloto de este vehículo, que arrojó un resultado de 0,75 mg/l, el triple del límite permitido. De hecho, de haberse tratado de un vehículo a motor convencional, es decir, un coche o una moto, la infracción de habría tramitado por la vía legal. Sin embargo, estos límites no se aplican por el momento ni a bicicletas ni a patinetes, por lo que se le impone una sanción administrativa.

El uso de patinetes eléctricos en la ciudad viene suscitando desde hace meses un intenso debate sobre la regulación de estos vehículos. De hecho, este no es el primer incidente ni la primera multa que protagoniza uno de estos vehículos de movilidad personal o VMP.

El Concello sostiene que estos dispositivos no se pueden utilizar por las aceras, al igual que las bicicletas y adaptarse al tránsito de los peatones en las llamadas zonas de convivencia o plataformas únicas como es el caso de Curros Enríquez.

Pedaladas

Uno de los colectivos que urge la regulación municipal de estos vehículos es Pedaladas. Ayer aseguraron que la sanción a este usuario, por ejemplo, "carece de respaldo legal" por la falta de esta ordenanza. Según su postura, la normativa referida a la conducción de vehículos bajo los efectos del alcohol y drogas "no afectaría a un patinete eléctrico mientras el Concello no regule su uso y autorización a circular por lo que cualquier abogado con un poco de habilidad puede recurrir la sanción".