Un colgante de arnés de caballería encontrado por una vecina de Ponte Caldelas durante un paseo por el Castelo Grande, también conocido como el castillo de O Caldevergazo, está siendo estudiado en la Escola de Restauración de Bens Culturais de Galicia después de ser depositado por el Concello, con vistas a su donación al Museo de Pontevedra.

La pieza, de origen medieval, consiste en un adorno conocido en castellano como "pinjante". Se trata, tanto por su tamaño como por sus características y estado de conservación, del mejor de los cinco que se han encontrado hasta ahora en Galicia. Por el momento se descubrió uno en Ourense, otro en Cotobade y dos más, de pequeño formato, en Lugo. El colgante caldelán está elaborado en bronce, con baño dorado y finalizado con esmalte a varios colores. El "pinjante" muestra a un caballero armado con escudo y espada en alto y adornado con unas alas emplumadas que se especula puedan ser una alegoría de su valor en la batalla. El escudo heráldico, que aún no fue identificado, está dividido en cuatro porciones en las que se pueden ver dos castillos en color rojo y dos patos negros con las patas y pico también en rojo.

El broche permite, además, adivinar la cara y las facciones del caballero. Se especula con la posibilidad de que fuera elaborado, bajo encargo de una familia noble, en alguna de las fábricas que había en el Levante español. La pieza fue descubierta por la vecina Maica Juncal durante un paseo por el castillo después de los incendios forestales de octubre de 2017, que despejaron completamente este importante yacimiento arqueológico caldelán. Se trata de un enclave lleno de historia y misterios por resolver, pues nunca fue objeto de una excavación arqueológica, tal y como explican desde el Concello.

La mujer entregó la pieza en el Concello y el alcalde, Andrés Díaz, con el asesoramiento del arqueólogo Alberte Reboreda, la puso a disposición de la Escuela de Restauración con vistas a su donación al Museo de Pontevedra, que se producirá en los próximos días. El hallazgo también fue comunicado a las autoridades en materia de Patrimonio. El alcalde, acompañado de la vecina autora de este descubrimiento y del arqueólogo que asesoró al Concello, visitó estos días la Escuela de Restauración donde recibió explicaciones sobre el valor de esta singular pieza.