El Plan de Sendas que la Xunta de Galicia a través de la Consellería de Infraestructuras ha puesto en marcha permitirá resolver muchos de los aspectos que tanto en temas de movilidad como de convivencia peatonal y ciclista permitan las dos vías autonómicas que recorren Marín.

Se trata, según la alcaldesa María Ramallo, de "una apuesta y solicitud del gobierno local que desde la posibilidad de introducir aspectos que eran importantantes en el Plan de Sendas, que está ejecutando la Agencia Galega de Infraestruturas, de especial relevancia para que las conexiones entre núcleos, entre parroquias y que no solamente a través del tráfico rodado, fueran posibles".

El diseño de los proyectos se llevó a cabo en cuatro tramos de especial relevancia, el primero de ellos en la PO-551, tramo de la carretera de Marín hacia Bueu y Cangas por la costa. Esta carretera tiene su conexión garantizada con la ejecución de los dos tramos que faltaban por unir.

El segundo tramo corresponde a Vilaseca-Lapamán, que está actualmente en ejecución. La obra la está realizando la empresa adjudicataria Covsa y está en la ejecución de los muros de contención y en la ocupación de los terrenos que fueron objeto de expropiación.

Tiene un presupuesto de 750.000 euros y permitirá en uno de los tramos con más tráfico al incorporarse a la carretera autonómica a través de la rotonda los usuarios de la Variante, acometer mejoras para la conexión peatonal por uno de sus márgenes.

En cuanto al tramo de Bagúín a Seixo., ya está sometido a información pública para que se realicen las alegaciones que fueran necesarias. Conllevará expropiaciones a 40 propietarios y tiene un presupuesto de 600.000 euros.

Se prevé la colocación de un semáforo con pulsador y con paso de peatones a la altura de la marquesina y discurrirá por la margen derecha en dirección a Seixo hasta que quede unido con las actuales aceras que discurren por la calle Dr. Otero Ulloa en el casco urbano de Seixo.

Con estas actuaciones toda la PO-551 quedaría perfectamente conectada para su uso peatonal, permitiendo en los tramos en que es posible la convivencia con la bicicleta, después de la ejecución de la senda de Bagüín.

Por lo que respecta a la PO-313, carretera Marín-Moaña, e una vía autonómica en la que se plantean dos tramos de sendas. La primera va de Coirados a Pardavila, sometido a información pública. Es el primero que se va a desarrollar y disciurre por la margen izquierda y supone expropiaciones de las franjas, ya en su día muchas de ellas ya expropiadas, aunque no fueron efectivamente ocupadas por Carreteras y que posibilitará esa conexión hasta un núcleos muy intenso de viviendas, Llegará prácticamente a la entrada del Centro social del Juan XXIII.

La senda Pardavila-Cadro es otro tramo en el que se está tramitándo el proyecto ante otros organismos y posteriormente saldrá a exposición pública.

La ejecución de estos cuatro tramos costará 3 millones que permitirán garantizar itinerarios más seguros, fomentar la facilidad de las conexiones a pie y en bici en los tramos en los que sea posible por motivos de seguridad.