El repetido lema de campaña 'Más personal y menos ladrillo' se ha traducido en un recorte de fondos para las facultades y escuelas a cambio de la consolidación de personal, la reducción de horarios y el abono de pagas extraordinarias pendientes. Sus responsables se han visto obligados a ajustar el presupuesto confiando en que el "esfuerzo común" tenga su compensación. La bajada global es de un 6,5% -casi 179.000 euros menos-, pero en varios centros de la Universidad de Vigo alcanza el 10% y las mayores caídas se registran en Fisioterapia -30,2%-, Historia -24,5%-, Ciencias de la Educación -22,7%- y Ciencias Empresariales y Turismo -20%-.

"La apuesta del equipo de gobierno es que haya una consolidación del personal, que en nuestro centro es muy necesaria. Es el compromiso que tienen y de momento todavía no hemos podido valorar si es una apuesta real porque llevan poco tiempo. Confiemos en que sí lo sea y tenga resultados", comenta la decana de Fisioterapia, Eva Lantarón.

El centro pontevedrés registra la mayor reducción presupuestaria al pasar de 67.585 euros a 47.127. "La partida que más se recorta será la de mantenimiento. Por el momento, nuestras necesidades están cubiertas y si surgiese alguna necesidad importante entendemos que el Rectorado nos apoyaría. Pero la reducción de fondos no va a interferir en la buena marcha del grado", añade.

La Universidad de Vigo cubrió este curso el 96% de las plazas de nuevo ingreso ofertadas en un total de 62 grados. La tasa es ligeramente inferior a la del periodo 2017/18, cuando se alcanzó un 98%, debido a la pérdida de 92 alumnos. Aún así, el rector Manuel Reigosa está "relativamente satisfecho" dada la "bajada notable" de estudiantes que han sufrido todos los campus españoles debido al descenso demográfico.

"El sistema gallego tiene que trabajar mucho para cubrir los cupos y, salvo comunidades que han aumentado la matrícula en másteres, las universidades públicas sufren descensos bastante acusados. En todo el Estado hay menos jóvenes en edad de estudiar", destacó ayer durante la presentación de los datos de ocupación en el antiguo Rectorado de Areal junto a la responsable de Captación de Alumnado, Natalia Caparrini.

En total, las aulas de primero cuentan con 3.606 nuevos alumnos este curso, el 50,4% mujeres. Más de la mitad estudian en el campus vigués -el 54,8%- y las ramas de conocimiento con la mayor cifra de matriculados son Ciencias Sociales y Jurídicas -1.734- y las Ingenierías -954-. Además, en los 63 másteres ofertados se matricularon 1.259 estudiantes por primera vez.

La cifra global de la Universidad es de 20.473 alumnos: 16.577 matriculados en los grados, 2.015 en los másteres y otros 1.267 en los programas de doctorado. Por campus. 11.205 estudian en Vigo, 4.606 en Ourense y 4.048 en Pontevedra.

Para paliar el descenso de alumnos en Galicia, la institución viguesa apuesta por captar universitarios en Portugal e Iberoamérica como primeros mercados objetivo, sin renunciar a los de "otras latitudes" gracias a los itinerarios en inglés que ya funcionan en algunos centros.

Reigosa también avanzó que ya han empezado los trabajos previos y los primeros contactos con la industria del entorno vigués para ofertar dos grados duales relacionados con la automoción y las ingenierías de telecomunicación e informática. Los alumnos realizarán 60 créditos dentro de las propias empresas, lo que "facilitará su encaje laboral". A día de hoy, solo se imparte un título de este tipo en el País Vasco y la respuesta en el tejido económico, destacó el rector, está siendo "muy positiva".

Respecto a los títulos con más dificultades a la hora de completar sus plazas como Ciencias del Lenguaje, Recursos Mineros y Energéticos o Ingeniería Agraria, Reigosa se comprometió a defender su permanencia ante la Xunta dado que su supresión supondría "un empobrecimiento" del sistema universitario gallego y un "déficit de conocimiento", además de reivindicar las buenas salidas laborales de muchos de estos títulos.

"No se puede entender que no tengan más matrícula porque son muy interesantes para la sociedad y el tejido económico, tienen empleo y se imparten con una calidad muy elevada. Tomamos posesión en junio y solo tuvimos tiempo para hacer unos vídeos de promoción de estas titulaciones, pero a lo largo de este año desarrollaremos una apuesta muy completa", adelantó.

"Trabajaremos con los equipos directivos de cada centro para tomar medidas concretas, pero la clave está en dar a conocer las salidas, porque sí las tienen y eso no llega", subrayó al respecto la vicerrectora Natalia Caparrini, que también se refirió a otras iniciativas del plan de captación que ya se han puesto en marcha como las visitas comarcales para dar a conocer la oferta de títulos y todos los servicios de la Universidad y la reciente jornada de orientación celebrada en el campus.