Los comedores escolares suponen un auténtico quebradero de cabeza para la Federación de Padres. Mientras mantiene un frente abierto con el Concello para renegociar un convenio que alivie la asfixia, económica y de gestión, que suponen los casi veinte comedores de primaria que dependen directamente de la Federación, la FANPA trata de dilatar una segunda batalla, la de dotar a Pontevedra de un comedor para los alumnos de Secundaria.

Los padres no están dispuestos a dar por perdida esta batalla e instan a la Federación a buscar una solución a los cientos de escolares de Secundaria, con edades de entre 12 y 16 años, que carecen de instalaciones en las que comer al término de la jornada lectiva.

La Federación está en hecho. Después de que el IES Sánchez Cantón rechaza acoger estas instalaciones, la FANPA es instada desde varias ANPAs de la ciudad a presionar a las administraciones públicas para que cedan un local que pueda utilizarse como comedor para Secundaria durante dos horas y media al día.

"Sabemos que no es fácil. Somos conscientes de que la FANPA está desbordada, pero hay que darle una solución a esta situación porque es un problema real", explican desde la ANPA de Barcelos.

Hacen un llamamiento a los padres para que respalden el posicionamiento de la Federación, para lograr que uno de los muchos locales públicos existentes en la ciudad sea cedido para este uso. "Necesitamos padres con ideas brillantes que nos ayuden a desbloquear esta situación, porque es cierto que ningún miembro de la FANPA ni de las ANPAs percibe un euro por el tiempo que dedica a la gestión de estos problemas".

A mayores, esta madre considera que "entre todos, además de descargar trabajo a la directiva de la FANPA, podemos encontrar soluciones a los problemas que nos podrán para evitar la cesión. Necesitamos soluciones con mucha imaginación. Cualquier sala puede ser habilitada como comedor de Secundaria, y desmontada para otros usos a partir de las 4 de la tarde. No es difícil encontrar un local que reúna las condiciones, pero es imprescindible tener voluntad para llegar a un acuerdo".

Varios centros escolares de Primaria permiten este cuso que exalumnos utilicen sus instalaciones para comer. "Pero esto es una solución provisional que no resuelve el problema de fondo".