| La basílica de Santa María la Mayor celebró ayer la Jornada Mundial del Enfermo, con misas en honor a Nuestra Señora de Lourdes que contaron con sillas de ruedas facilitadas por Cruz Roja para aquellas personas con movilidad reducida. Tras la misa de tarde hubo procesión de antorchas, acompañando a las imágenes de Nuestra Señora de Lourdes y Santa Bernadette, con amplio recorrido por el centro de la ciudad.