El próximo lunes, día 14, se bendecirán las nuevas campanas de la capilla de San Roque, copia exacta de las anteriores del año 1871 y fundidas en Arcos da Condesa siguiendo un método tradicional por los campaneros artesanales de la familia Ocampo.

"La refundición, que ha costado 5.505 euros, ha sido posibles gracias a la generosidad de los feligreses, que con sus donativos y sus colectas específicas a lo largo de los dos últimos años han logrado reunir dicha cantidad, contando con la colaboración de algunas asociaciones y empresas asentadas en el propio barrio de San Roque, así como del Arzobispado", indican los portavoces de la parroquia de Santa María, de la que depende la capilla.

Las nuevas campanas fueron forjadas con una aleación de bronce puro compuesta por cobre y estaño. La mayor tiene cerca de 50 centímetros de diámetro y un peso de unos 85 kilos y la pequeña 46 centímetros de diámetro y alrededor de 60 kilos.

La antigua barra de metal de la que colgaban ha sido sustituida por unos yugos de madera.