| Mucha expectación en la "I Baixada de Carrilanas" que se celebró en Portas, en la parroquia de Romai. Estos extrafalarios bólidos llenaron de ambiente el tramo de 1.100 metros por el que circulaban, entre los lugares de Tras do Río y Veiga da Fonte-Vilavedra. Una bajada sinuosa que dio para algunos accidentes y, sobre todo, para mucho humor. La prueba, correspondiente a la Copa de Galicia, comenzó a partir de las tres de la tarde. Los excéntricos vehículos sin mecanismos de propulsión construidos con multitud de materiales y formas, y a cuyos mandos iba expertos pilotos del alunizaje, se echaron en tromba cuesta abajo como si de un Fórmula Uno se tratase ante el aplauso generalizado de la gente apostada a ambos márgenes de la carretera. Fue una jornada divertida que la organización espera que tenga su continuidad en los próximos años.