El atractivo del Camino Portugués sigue creciendo y también la repercusión que tiene para la ciudad a nivel económico y turístico. Pontevedra, parada casi obligatoria en las distintas etapas de la ruta a Santiago, selló el pasado año más de 46.000 "Compostelas", el documento con el que el romero acredita la realización del itinerario Xacobeo, lo que supone un nuevo récord en cuanto a número de peregrinos que llegaron a la ciudad.

Tino Lores, presidente de la Fundación Amigos do Camiño Portugués, auguró ayer que 2016 volverá a romper estos registros. Al menos en lo que va de ejercicio los números son incluso mejores con los de 2015 y esta Semana Santa el albergue lleva ya varios días colgando el cartel de completo, siendo necesario habilitar algunas plazas para que grupos de peregrinos puedan pernoctar en el pabellón de deportes, al superar con creces las 56 que ofrece el albergue pontevedrés. Son una media de 80 los romeros a los que da cobijo el albergue estos días, a los que hay que sumar los muchos que buscan alojamiento por su cuenta en la ciudad. A este "boom" en la llegada de peregrinos que se vive estos días hay que sumar el buen comportamiento de los primeros meses del año, puesto que tanto en enero como en febrero también se superaron las pernoctaciones con respecto a 2015. Así las cosas, el presidente de Amigos do Camiño cree que se están cumpliendo las previsiones más optimistas y la ruta Xacobea a Santiago sigue creciendo año tras año atrayendo cada vez a peregrinos de los países más diversos. "El albergue parece una pequeña ONU", explicaba, indicando la disparidad de nacionalidades de los viajeros que estos días llegan a pie a Pontevedra rumbo a Compostela.

Según los cálculos exponenciales realizados por Tino Lores, las previsiones hacen pensar que en 2021, próximo Año Santo Xacobeo, la ciudad podría estar recibiendo entre 80.000 y 100.000 peregrinos, con el impacto económico que ello supondría para la ciudad del Lérez.

1,3 millones de impacto

Un cálculo hecho por lo bajo indica que actualmente el impacto que podría tener sobre la hostelería y comercio local el paso de los peregrinos por Pontevedra supera ya con creces el millón de euros. Los análisis realizados por la entidad que preside Tino Lores apuntan a un gasto medio de unos 30 euros por cada romero a su paso por la capital, una cantidad que multiplicada por los 46.000 que visitaron la ciudad el pasado año alcanza los 1,3 millones de euros.

Lores está convencido de que el impacto es todavía mucho mayor, dado que se está detectando también un cambio en el perfil del peregrino que llega a Pontevedra. No solo realizan el Camino Portugués los típicos peregrinos "mochileros" con escasos medios económicos, sino también otros de mayor poder adquisitivo y que buscan alternativas residenciales distintas a la del albergue en los hostales, pensiones e incluso hoteles de la ciudad.

De hecho, el propio alcalde de la ciudad, Miguel Anxo Fernández Lores, llamó la atención sobre el dato que aportó el presidente de Amigos do Camiño Portugués. De los 46.000 peregrinos que sellaron su "Compostela" en Pontevedra en 2015, solo 14.000 pasaron por el albergue, lo que supone que el resto tuvieron que buscar otro tipo de alojamiento para pernoctar.

Tino Lores se congratula de este cambio en el perfil del peregrino de tal forma que el albergue pueda seguir siendo utilizado por aquellos romeros más jóvenes y que quizá dispongan de menos recursos para completar la ruta a Santiago.